Desde que comenzó la guerra en Ucrania, cada vez más polacos han decidido comprar una vivienda en España y citan como una de las principales razones para tomar esa decisión la posibilidad de una invasión rusa.
Según datos de portales inmobiliarios españoles y polacos, el número de ciudadanos polacos que compraron una vivienda en España se incrementó un 160% en 2022, año en que empezó la guerra en Ucrania y se ha mantenido en niveles similares en los años posteriores, según publica este miércoles el principal diario polaco, 'Gazeta Wyborcza'.
En total, se prevé que más de 6.000 polacos tengan las llaves de su nueva casa en España al final de 2024, lo que les convertiría en el tercer grupo más numeroso de extranjeros compradores de vivienda en España, solo por debajo de británicos, alemanes y franceses.
Además de considerarlo una inversión rentable, muchos de los polacos ven tener una casa en España como "un seguro de vida" ante una posible invasión rusa o el estallido de un conflicto que afecte a su país.
Por otra parte, la inflación que ha afectado a Polonia durante los últimos años, con picos cercanos al 15%, y la incipiente "burbuja inmobiliaria" que según los expertos está camino de formarse, hace que un polaco encuentre relativamente baratos los precios de los inmuebles en zonas como la costa alicantina o la Costa del Sol.
Testimonios
"Si algo hemos aprendido en los últimos años es que en cualquier momento puede pasar cualquier cosa. Y siempre está bien contar con la opción de refugiarse en un lugar donde las cosas no estén tan mal", asegura por teléfono a EFE Hania Nawrocka, que el año pasado se compró un apartamento cerca de Málaga.
Karol Baginski, un informático de Cracovia (sur), aseguró a EFE que "por menos de lo que costaría un apartamento de 55 metros cuadrados y dos habitaciones he podido comprar un piso de 90 metros con garaje y tres habitaciones en una urbanización de lujo en Torrevieja. No tuve ni que pensarlo".
En algunas zonas de Alicante ya hay inmobiliarias con personal polaco que ofrecen gestionar todo el papeleo a las familias polacas que planeen mudarse allí, incluida la matriculación de los niños en escuelas públicas, por 200 euros.
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