El juez José Luis Calama ha dirigido un intenso interrogatorio sobre los motivos que llevaron a Emilio Saracho a sustituir a Ángel Ron en la presidencia del Banco Popular. Fuentes jurídicas han asegurado a Vozpópuli que el magistrado trata de determinar si, tal y como ha asegurado Ron, el entonces consejero y accionista Antonio del Valle y la también consejera Reyes Calderón habrían realizado maniobras para cambiar al presidente con la única intención de vender el banco.
El titular del Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional ha citado este miércoles y jueves en calidad de investigado al que estuviera al frente del Popular entre 2006 y 2017, acusado de presunto un delito societario de administración desleal. Aunque ha interpelado a Ron por la ampliación de capital de 2016 por la que se le investiga, se ha enfocado en los meses previos a su salida del banco.
En concreto, el magistrado ha mostrado especial interés en el período comprendido entre septiembre y diciembre de 2016, cuando tuvieron lugar las llamadas y negociaciones para el nombramiento de Saracho al frente de la entidad. En este sentido, ha pedido detalles de las notificaciones recibidas por Ron y de las reuniones celebradas para la elección del que sería presidente del Banco Popular. Fuentes jurídicas han asegurado a Vozpópuli que el juez ha preguntado lo mismo a otros exdirectivos investigados en la causa.
La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), sin embargo, descartó en un informe de septiembre de 2017 "el posible interés del Sr. [Del Valle] y de los inversores con él vinculados en provocar una caída en el precio de cotización de la acción de Banco Popular en la medida en que esta operativa sería contraria a sus intereses al estar penalizando su inversión en el capital de Banco Popular", según publicó El Confidencial.
El fichaje de Saracho
A preguntas del magistrado, Saracho explicó en sede judicial que había sido contactado en noviembre de 2016 por el cazatalentos Spencer Stuart y posteriormente por la entonces presidenta del comité de nombramientos del banco Reyes Calderón.
El que fuera elegido dijo que se había negado en varias ocasiones a aceptar la oferta y que llegó a admitir que era un banquero de inversión y que consideraba más pertinente para el cargo a un banquero comercial. Asimismo, aseguró que antes de aceptar el cargo pidió reunirse con el entonces presidente del Popular y con el vicepresidente Roberto Higuera para conocer la situación.
Ron ha reconocido que la relación con su sucesor fue en un principio profesional pero que se fue deteriorando hasta el momento del relevo en febrero de 2017. El expresidente ha asegurado que aquellas conversaciones lideradas por Calderón para fichar a Saracho se realizaron en medio de "maniobras" carentes de "transparencia" en connivencia con el empresario mexicano Antonio del Valle, quien llegó a ser el máximo accionista individual del Popular y que presuntamente quería apartarle de la presidencia para hundir el banco y después comprarla a bajo precio.
Las "amenazas" de Del Valle
Ron ha señalado que Del Valle le amenazó con acudir a la prensa o convocar Junta de Accionistas si no promovía el relevo, según han explicado a este diario fuentes presentes en la declaración. En este sentido, ha insistido en que el mexicano quería quedarse a toda costa con el Banco Popular, por lo que llegó a sugerirle que lanzara una OPA. Del Valle está citado a declarar el próximo 27 de noviembre ante el juez Calama.
Tal y como publicó Vozpópuli en marzo de 2018, Del Valle tenía intenciones de hacerse con el banco. Según figura en un correo interno de la entidad de agosto de 2016, en la cúpula del Popular se sabía que inversores mexicanos trabajaban con JPMorgan en México y que Saracho -entonces vicepresidente mundial de la financiera- estaba al tanto de sus intenciones.
Como parte de su defensa, el exdirectivo investigado ha aportado a la causa un correo con fecha 25 de noviembre de 2016 enviado por la Sindicatura de Accionistas a la comisión de nombramientos de Calderón. Se ha apoyado en el documento, recogido por EFE, para explicar al magistrado que los accionistas no apoyaban su salida del banco.
Los ejes de la investigación
El juez ha interrumpido a Ron en alguna ocasión para decirle que desarrollara ciertos argumentos en respuestas a su defensa. Sin embargo, ha escuchado y repreguntado en torno a la hipótesis del banquero sobre su cese, tal y como ha hecho en interrogatorios anteriores en los que ha preguntado sobre el proceso de sucesión.
La investigación del caso Popular se divide en dos piezas. La primera versa sobre la ampliación de capital de 2016, con Ron como principal investigado. En la segunda se investiga a Saracho por la presunta manipulación del mercado tras la difusión de noticias con datos supuestamente falsos para hacer caer el valor de las acciones en los últimos días de vida del banco.
Hasta ahora han sido imputados 35 excargos de la entidad, incluidos expresidentes y exdirectivos. Según el calendario del Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional, están previstas declaraciones hasta la segunda semana de diciembre y luego de nuevo a partir de febrero de 2020.
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