Economía

El juez deja visto para sentencia el juicio entre Jaime Castellanos y Willis por su correduría

Alea iacta est. El Juzgado de lo Mercantil nº2 de Madrid ha dejado visto para sentencia el juicio entre Willis Towers Watson y su expresidente Jaime Castellanos y sus socios

Alea iacta est. El Juzgado de lo Mercantil nº2 de Madrid ha dejado visto para sentencia el juicio entre Willis Towers Watson y su expresidente Jaime Castellanos y sus socios por una presunta infracción de competencia desleal. Tras la celebración de dos sesiones, la última el pasado jueves, el juez ha emplazado a las partes a remitir sus escritos de conclusiones antes de mediados de noviembre y se espera una sentencia antes de final de año.

Según explican las fuentes consultadas por Vozpópuli, durante las dos jornadas han desfilado varios testigos, de los cuales algunos son exempleados de Willis hoy en las filas de Asterra, la correduría fundada por Castellanos y los exdirectivos Antón Serrats y Alberto Gallego que ha originado el pleito. También se ha presentado el contenido del informe 'forensic' elaborado por Grant Thornton que encargó Willis para analizar los dispositivos móviles de su antigua cúpula.

Esta pericial incluye emails y mensajes cruzados entre los exdirectivos con los que Willis quiere acreditar sus sospechas de que los tres trazaron un plan para ejecutar una salida coordinada de la empresa y, posteriormente, poner en marcha Asterra.

Dos días de juicio

Durante estas sesiones, Willis ha recordado al juez que lleva la causa, Andrés Sánchez Magro, que algunos de sus clientes comunicaron de forma repentina la no renovación de sus pólizas para contratar los servicios de Asterra. Algunos de estos clientes son Lladró, Gestamp o Roca Junyent. Este despacho es el que acaba de tomar las riendas de la secretaría del consejo de la correduría, como publicó este diario recientemente.

A este respecto, cabe recordar que la correduría norteamericana intentó frenar una posible sangría de clientes y trabajadores (muchos se pasaron a las filas de Asterra) con una solicitud de medidas cautelares que fue desestimada por el juez.

Además de los citados ejecutivos, la demanda también está dirigida contra Marsh & McLemman International, acusada de dar soporte financiero a Castellanos y sus socios para constituir la nueva empresa.

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