Como es habitual, este mes de agosto no fue positivo en términos de empleo. Se destruyeron 185.385 puestos de trabajo y se registraron 24.826 parados más como consecuencia del fin del verano y de las contrataciones para el periodo vacacional realizadas en mayo, junio o incluso julio, que este año fueron flojas.
Los datos de afiliación media a la Seguridad Social y parados registrados en el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), publicados este lunes por los Ministerios de Seguridad Social y Trabajo, respectivamente, son similares o incluso algo mejores a los registrados en las temporadas previas a la pandemia (2018-2019).
En todo caso, la cifra de afiliación media se situó en 20.706.500 en agosto, la más alta de la serie en un mes de agosto. El Ministerio de Seguridad Social destaca que en el periodo enero-agosto la afiliación media ha crecido en 410.229 personas, lo que supone "uno de los comportamientos más dinámicos de la serie".
Sin embargo, los meses de verano no fueron especialmente positivos: en mayo se crearon 200.441 empleos, la cifra más baja en ese mes desde 2020 (y exceptuando el año de la pandemia, desde 2016); en junio, 54.541 (el peor dato desde 2015) y en julio, 21.945 (frente a los 50.000 empleos que se creaban de media antes de la pandemia).
En cuanto al paro, el Ministerio de Trabajo comunica un total de 2.702.700 desempleados, la cifra más baja en un mes de agosto desde 2008. Así lo destaca el equipo de la ministra en funciones, Yolanda Díaz, en su nota de prensa.
Varios servicios de estudios, entre los que destacan Fedea y BBVA Research, vienen alertando desde hace meses que los datos de paro no son representativos desde la reforma laboral, pues no contabilizan a los fijos discontinuos que pasan a la inactividad (no trabajan ni cobran durante un periodo de tiempo e, incluso, pueden estar cobrando una prestación por desempleo), un colectivo que ha crecido de forma exponencial en los últimos dos años.
Sector servicios
De los 185.385 puestos de trabajo que se destruyeron, 174.380 eran asalariados y sólo 11.005 autónomos. La mayoría se localizaba en el sector servicios (136.535), aunque el empleo cayó en todos los sectores: la construcción perdió 18.768 afiliados; la industria, 15.934; y la agricultura, 14.148.
Si se desglosan aún más las actividades dentro del Régimen General, la educación protagonizó la mayor caída de la ocupación con 59.407 cotizantes menos (-6,3%), algo que ya ocurrió en el mes anterior. Es decir, uno de cada tres empleos perdidos se localizaban en este sector.
Lo mismo se observa en el paro: en agosto creció en 23.097 personas en el sector servicios, en 4.729 personas en la construcción, y en 2.483 personas en la industria. Sólo bajó en la agricultura, con 2.874 desempleados menos que en julio. También el colectivo Sin Empleo Anterior disminuyó en 2.672.
Por regiones, el paro registrado bajó en agosto en la comunidad autónoma de La Rioja y subió en las 16 restantes, encabezadas por Cataluña (7.516), Comunidad Valenciana (3.190) y Andalucía (2.882). Por provincias, descendió en siete (Huelva, León y Almería) y aumentó en las 45 restantes (destacando los incrementos de Barcelona, con 5.431 parados más; Madrid, 2.806 más; y Valencia, 1.740 más).
Finalmente, por edad, se registraron como parados en el SEPE 3.919 jóvenes menores de 25 años (lo que supone una subida del 2,13% en términos relativos) y 20.907 con 25 o más años (0,84%).
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