Los últimos tiempos no están siendo muy positivos para la industria de automoción ante el panorama que se está viviendo en forma de incertidumbre en cuanto a tecnologías y normativas de emisiones; incertidumbre que en muchos mercados está generando una ralentización de las ventas y ajustes en forma de despidos, bien definitivos o bien temporales, en numerosas plantas de producción, España incluida.
Pero ahora el fabricante automovilístico alemán Daimler, matriz de Mercedes-Benz, quiere reducir personal para ajustar costes, pero no en las fábricas, sino en puestos ejecutivos, y plantea cerca de 1.100 despidos en todo el mundo, según el comité de empresa.
Medios alemanes han informado que en Alemania, donde Daimler emplea a casi 180.000 personas, la medida afectaría a uno de cada diez puestos en diferentes niveles directivos, aunque Daimler no quiso comentar la información. El presidente de Daimler, Ola Källenius, informará la próxima semana de la estrategia empresarial que va a seguir los próximos años.
Su antecesor Dieter Zetsche implementó a comienzos de año un programa de ahorro para afrontar la debilidad de las ventas automovilísticas, los costes de la manipulación de las emisiones en vehículos con motores diésel y las inversiones en eléctricos y otras nuevas tecnologías.
Las ventas de Mercedes-Benz Cars, perteneciente a Daimler, se han estancado en los diez primeros meses del año con un mínimo alza del 0,4% superando ligeramente los dos millones de vehículos entregados, debido sobre todo al estancamiento en Europa y Estados Unidos, aunque crecieron en Alemania y China.
Daimler bajó en los tres primeros trimestres el beneficio neto un 54%, hasta 2.720 millones de euros, tras crear provisiones en el primer semestre. La división de furgonetas Mercedes-Benz Vans sufrió en los tres primeros trimestres una pérdida de 2.035 millones de euros. Para el cuarto trimestre espera que el empeoramiento de la evolución económica en los mercados de camiones de Europa y Norte América tenga efectos en el resultado de la división de camiones Daimler Trucks.
Ligero crecimiento en España
En cuanto al mercado español, en el que las ventas globales hasta el pasado mes de octubre acumulan una caída de casi el 4%, Mercedes-Benz aguanta en datos positivos con un pequeño crecimiento de sus matriculaciones del 0,4%, un crecimiento en la línea de los resultados a nivel mundial.
Las casi 44.000 unidades comercializadas a falta de los dos últimos meses del año para cerrar el ejercicio le permiten de momento superar a sus dos más directos rivales, Audi y BMW, aunque por muy escaso margen. De finalizar así, sería la primera vez en la última década que Audi no encabezaría la lista de las marcas premium más vendidas en España.
Además de mantener un buen nivel de ventas de turismos nuevos, Mercedes-Benz ha estrenado una nueva modalidad de renting asociada a los modelos de segunda mano. Y es que tanto el mercado de vehículos de segunda mano como la venta a través del canal de renting son dos tendencias al alza en España. La compañía alemana se adapta a estos cambios en demanda de los clientes y ofrece una nueva forma de adquirir sus vehículos de ocasión gracias a un contrato de renting dirigido a particulares y autónomos.
Este grupo de clientes puede, por primera vez, acceder a un modelo de Mercedes-Benz en un formato de “todo incluido” mediante el pago de una única cuota fija mensual. El nuevo producto incluye el seguro a todo riesgo, los mantenimientos incluyendo piezas de desgaste (excepto neumáticos, incluidos opcionalmente) y todas las posibles averías gracias a la ampliación de garantía total del vehículo durante toda la duración del contrato.
