La historia reciente de Penouta, una aldea al este de la provincia de Orense, está ligada a la minería. Ahí explotó Rumasa un yacimiento de estaño y wolframio hasta los años 80, cuando la mina fue declarada inviable tras la expropiación de la empresa de José María Ruiz-Mateos. Hace unos años, una compañía canadiense, Strategic Minerals, se empeñó en aprovechar los desperdicios minerales y convertir el viejo yacimiento en la primera mina de coltán de España y en una de las pioneras de Europa.
La empresa minera está estos días de enhorabuena. Hace unas semanas, la Xunta de Galicia le dio permiso para explotar los recursos de la sección C del yacimiento. Se trata de una zona de la antigua mina a cielo abierto y con una extensión de 150 hectáreas. La compañía prevé extraer unos 50 millones de toneladas de mineral durante los 30 años de la nueva concesión, prorrogables a 75.
Strategic Minerals ha estado trabajando más de una década en la aldea para llegar a este punto. En 2011, comenzó a investigar las posibilidades del yacimiento abandonado. Sostenía que era posible aprovechar los residuos minerales. En 2018, la compañía empezó a procesar las balsas y escombreras de la antigua mina y a extraer estaño, cuarzo, feldespato y mica. A su vez, trabajaban junto al CSIC para diseñar un mecanismo para extraer columbita y tantalita, conocido coloquialmente como coltán. Lo lograron por primera vez a principios de 2020.
Este 'oro negro' es uno de los metales más preciados por la industria tecnológica y es relativamente escaso. En 2020, el 70% de las reservas mundiales, según cifras citadas por Efe, se situaron en el Congo. El país centroafricano exportó entre 2014 y 2017 más de 7.550 toneladas del mineral. "El coltán es muy escaso en la corteza terrestre, requiere que haya un proceso geológico, que se haya concentrado", explica a Vozpópuli Ester Boixereu, especialista en recursos minerales en el Instituto Geológico y Minero de España.
De hecho, según CSIC, la de Penouta es la primera mina de coltán de España y el único yacimiento para su extracción en toda Europa, aunque existen otros en investigación por el continente. La Unión Europea considera el coltán como un mineral estratégico. La industria lo utiliza para fabricar la mayoría de los dispositivos electrónicos que nos rodean, como nuestros smartphones.
La mina de coltán y el empleo en la comarca
Penouta es una de las 52 parroquias que forman el Ayuntamiento de Viana do Bolo. En las últimas décadas, la economía de esta comarca ha bailado al son de la actividad minera. Según El País, el antiguo yacimiento de Rumasa llegó a generar 145 empleos fijos de la comarca con sueldos de entre 80.000 y 100.000 pesetas anuales. El cierre en los 80, por tanto, supuso un duro golpe para las arcas de los vecinos. Algunos de ellos acabaron emigrando a otras regiones, como Cataluña o el País Vasco.
La llegada de Strategic Minerals reflotó parte del optimismo de la comarca, afectada por la despoblación. Según el diario de Prisa, uno de los compromisos iniciales de la firma, que hoy trabaja sobre el terreno bajo el nombre Strategic Minerals Spain, fue el de pagar 50.000 euros al año a los vecinos de la pedanía cuando comenzase la actividad extractiva. En 2019, recoge El Confidencial, los trabajos en la mina recuperada ya empleaban a 100 personas, y la mitad de ellas eran vecinos de la comarca. El nuevo permiso otorgado por la Xunta permitiría crear 75 nuevos empleos directos.
Aunque no todo son buenas palabras para la nueva actividad minera. Ecologistas en Acción denunció hace meses la existencia de una "grave contaminación" con metales pesados en las aguas próximas a la explotación, superándose "en varias órdenes de magnitudes los valores máximos permitidos de arsénico, mercurio, cadmio y plomo".
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