Según la redacción del trazado del futuro AVE Madrid-Galicia, la provincia de Zamora (190.000 habitantes) contará con dos estaciones de alta velocidad. Una, prevista para 2012 y todavía sin abrir, estará en la capital zamorana (65.000 h.). La otra se pensó para 2014 en un lugar más furtivo aún, el municipio de 28 habitantes de Otero de Sanabria. Así se decretó en 2009 y así lo celebró el entonces delegado del Gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo: “Aquellos que dudaban que viniese el AVE van a tener el AVE en 2012 en Zamora con una estación, y en 2014 con otra estación en Sanabria”. Cuatro años después, Fomento mantiene los planes, aunque recientemente han sonado las alarmas en el gabinete de Ana Pastor.
El ministerio acaba de pedir un estudio de viabilidad de una siempre costosísima estación en la pedanía minúscula de la comarca sanabresa (menos de 7.000 habitantes). El lunes, el secretario de Estado de Infraestructuras, Rafael Catalá, templó las expectativas durante su visita a Zamora al reclamar que la estación de Sanabria tendrá que estar “asociada al estudio de las necesidades de tráfico”. “No tiene ningún sentido”, dijo, “destinar dinero de los impuestos de los españoles a pagar infraestructuras innecesarias”. Sin embargo, Catalá insistió en que “si se acredita que hay una demanda constante y suficiente, habrá estación y por tanto parará el AVE. A fecha de hoy, la estación está en el proyecto”.
La crisis, pero también la sensación de que en siniestros como el trágico accidente de Angrois de hace dos meses las prisas que imprime la alta velocidad pueden tener algo que ver, han hecho que el equipo de Pastor revise obras diseñadas en tiempos mejores e imposibles de asumir hoy. Pero nadie da por enterrado el proyecto. Con todo, el último giro de Fomento pone de relieve que el AVE no aprende de sus excesos: ya hay siete de estas terminales en España alejadas de núcleos urbanos cuyas líneas de AVE solo dan pérdidas a Renfe.
La estación zamorana no resiste ningún plan de viabilidad económica, especialmente si se toman los escasos estudios arrojados sobre la materia: partiendo de la tesis del catedrático de Economía Aplicada Ginés de Rus de que, estudiados todos los impactos posibles, puede que ninguna relación AVE (ni siquiera los trayectos que conectan Madrid con Barcelona, Valencia o Málaga) sea completamente rentable en el país, parece evidente que las que partan de Otero no serán la excepción.
El dispendio dedicado a la alta velocidad también empieza a ser más criticado desde los blogs especializados. En primavera, Renfe dejó de operar en numerosas estaciones de la comarca, significándose especialmente la supresión de la antigua línea Ourense-Puebla de Sanabria. La desaparición de trayectos convencionales y la probable ausencia final de AVE amenazan con dejar Sanabria sin tren.
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