Respaldo internacional a la mayor inmobiliaria española tras las elecciones generales del 23-J. La agencia de calificación Moody's ha vuelto a asignar a Merlin Properties una perspectiva "positiva", manteniendo su deuda dentro de la calificación de calidad media Baa2. Y ello mientras ha resaltado, para España, los riesgos que entraña el bloqueo político resultante de los comicios de cara a los objetivos fiscales del país en "un contexto de desaceleración económica".
Por lo pronto, la que es una de las principales agencias de calificación de deuda a nivel mundial ha vuelto a depositar su confianza en las perspectivas de la principal socimi del Ibex 35, a la que había mejorado su puntuación tras la macrooperación de venta de las oficinas que alquilaba a BBVA -la cartera Tree- el año pasado, por 1.987 millones de euros.
Las inmobiliarias afrontan unos resultados semestrales que marcarán el pulso de la valoración de activos tras el impacto de la subida de los tipos de interés del Banco Central Europeo
La estrategia de reducción de deuda que ha ido asumiendo el equipo de Ismael Clemente ha sido también valorada positivamente por Standard & Poors, que mantiene a día de hoy la misma calificación que Moody's y con una perspectiva también "positiva" para la compañía participada por Banco Santander, Manuel Lao y el mayor fondo de inversiones del mundo, BlackRock.
Termómetro de las inmobiliarias en la víspera de un frenazo económico
Las inmobiliarias afrontan unos resultados semestrales que marcarán el pulso de la valoración de activos tras el impacto de la subida de los tipos de interés del Banco Central Europeo. La propia Merlin ya tuvo que ajustar el valor de su cartera al cierre de 2022 con un descuento de 250 millones, equivalentes al 1,5% de sus activos -oficinas, centros comerciales, naves logísticas y centros de datos- y a la mitad de sus beneficios el último año. Un tajo que la compañía logró atenuar por la capacidad para trasladar la entonces elevada inflación a las rentas.
"Hemos soportado 44 puntos básicos de la expansión de las yields (en 2022), pero creemos que se viene un año entero de compresión, de otros 50 puntos básicos", comentó Clemente en un encuentro con periodistas en febrero. "Hay una carrera entre los bancos centrales por frenar la inflación, y los gobiernos populistas por aplacar dichas medidas, pero creemos que los bancos ganarán la carrera y, antes o después, lo sentiremos", advirtió entonces el consejero delegado de Merlin.
Merlin mejoró su ebidta al cabo del primer trimestre, alcanzando los 90,4 millones, y asimismo, las rentas comparables (un 8,1%), a la espera del impacto que tendrá la caída de la inflación en los meses siguientes como así también, una incipiente desaceleración del mercado de oficinas.
Al cabo del primer trimestre de 2023, la inmobiliaria mantuvo un ratio de endeudamiento bajo, en el 32,5% de sus activos. En abril, repagó 744,5 millones en bonos, una operación tras la cual conservó un coste medio de la deuda del 2,2% y despejó el camino de vencimientos hasta mayo de 2025.
En global, la compañía sumaba al cierre del primer trimestre una deuda neta de 3.792 millones de euros con una caja de liquidez de 1.921 millones. Durante el primer trimestre llegó a mejorar su ebitda, alcanzando los 90,4 millones, al igual que las rentas comparables (un 8,1%), a la espera del impacto que tendrá la caída de la inflación en los meses siguientes como así también, una incipiente desaceleración del mercado de oficinas. En suma, en junio, la empresa ha tenido que actualizar nuevamente el valor de sus activos, una circunstancia de cuyo impacto en los resultados rendirá cuentas este jueves.
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