"Ojalá nos dé tiempo a aprobar los Presupuestos, pero si no es así, se extienden los Presupuestos de este año, que son muy positivos, pendientes de canalizar los fondos europeos". Así lo ha planteado este jueves en la Ser la vicepresidenta primera del Gobierno en funciones, Nadia Calviño, preguntada por si prevé aprobar los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2024. Estas declaraciones contradicen las de la ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, que hace una semana planteaba que trabaja con la intención de se aprueben, en todo caso, con retraso, tras la prórroga automática en enero.
Montero aseguró en TVE que siguiendo la "instrucción" de Pedro Sánchez, Hacienda está ya trabajando con la "voluntad" de aprobar los PGE "en tiempo y forma" para que entren en vigor antes del 31 de diciembre. Sin embargo, admitió que el proceso de negociación para la investidura podría "retrasar" este calendario.
Montero explicó que su Ministerio está llevando a cabo los pasos iniciales para la formulación de los PGE. Esto implica "determinar el perímetro" en el que deben encajar las Cuentas, llevar a cabo "trabajos con Bruselas" y discutir dentro del propio Gobierno las proyecciones macroeconómicas.
"Nosotros vamos a seguir trabajando para que, en el momento en que esté constituida la investidura y esté designado el Gobierno, se pueda impulsar ese proyecto", aseguró.
Los nuevos presupuestos serían sancionados con cierto "retraso", apuntó la ministra de Hacienda en funciones. Vozpópuli informó de que su Ministerio da por descontada una prórroga de los Presupuestos de 2023, que se produce si el 31 de diciembre no se han aprobado los Presupuestos del año siguiente, pero que cuenta con poder aprobar las Cuentas de 2024 en el primer trimestre. Cabe recordar que las de 2017 y 2018 se validaron en mayo de los respectivos años en curso y que las de 2012 vieron la luz en marzo del mismo ejercicio.
Negociación con Bruselas
Sin embargo, desde el entorno de la negociación de la investidura se plantea que el Gobierno en funciones valora la posibilidad de no aprobar Presupuestos de 2024 tras su previsible investidura y mantener prorrogados los de 2023. Si se lograran aprobar las Cuentas de 2025, esto le permitiría aguantar casi la legislatura en su totalidad. Así tendría tiempo además de reformar la Ley de Estabilidad Presupuestaria para eliminar la capacidad de veto del Senado, ahora controlado por el PP, a los objetivos de estabilidad presupuestaria.
A la espera de la entrada en vigor plena de la vuelta de las reglas fiscales, los Presupuestos de 2023 se considera que son adecuados para una prórroga y en este sentido se ha pronunciado Calviño, que ha apuntado además a su papel de canalizadores de fondo europeos. "Los avances en empleo, nuevas tecnologías no se entienden sin los fondos europeos y para eso han sido fundamentales los Presupuestos de estos años", ha dicho.
La vicepresidenta primera en funciones ha asegurado además que trabaja intensamente en dos asuntos clave pendientes en el Plan de Recuperación: "El Gobierno en funciones no ha dejado de trabajar intensamente y hablar con la Comisión Europea sobre la adenda, y para que pedir después antes de final de año el cuarto pago", ha afirmado.
Calviño, pendiente del BEI
Esta contradicción entre las declaraciones de Hacienda y Asuntos Económicos se produce además cuando Calviño está pendiente de la elección a la Presidencia del BEI los próximos 16 y 17 de septiembre en Santiago de Compostela, y cuando ha asegurado que su candidatura tiene muchas posibilidades de éxito. Si es elegida deberá incorporarse al Banco en enero, con lo que sólo podía estar en todo caso en el Gobierno hasta diciembre y la dirección de la Política económica del Gobierno y del PSOE queda en el aire y se plantea como un segundo plato.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación