Economía

Nissan cerrará su planta de Barcelona, según el diario Nikkei

La decisión de la empresa japonesa pone en riesgo más de 3.000 empleos directos

Nissan cerrará su fábrica de Barcelona, según ha informado este jueves el diario japonés Nikkei. La decisión de la empresa se enmarca dentro del plan de reestructuración que planea recortar 2.600 millones de euros al año en costes. El posible cierre de la planta barcelonesa pone en riesgo más de 20.000 empleos. Más de 3.000 puestos de trabajo directos y otros 20.000 indirectos.

La clausura de la planta barcelonesa se enmarca dentro de su plan estratégico, en el que prevé reducir la producción en Europa para focalizarse en Nortemérica, China y Asia. Nissan pretende trasladar la fabricación a factorías de su aliada Renault, en suelo francés, según indica el diario financiero japonés.

Actualmente, unos 55.000 vehículos de la marca son fabricados en España, un 10% del total de su fabricación europea. En la planta barcelonesa se produce la furgoneta eléctrica e-NV200; la pick up Navarra y versiones de esta, Clase X y Alaskan para Mercedes y Renault, respectivamente. 

Los empleados, en huelga desde el 4 de mayo

Los empleados de la planta barcelonesa llevan en huelga indefinida desde el pasado 4 de mayo. Dicha protesta fue convocada para Nissan aclarase cuanto antes qué planes de futuro tiene para sus centros en Cataluña, en especial para la planta de la Zona Franca. Este viernes los comités de empresa de Nissan se reunirán mañana con representantes del Departamento de Trabajo de la Generalitat, que los ha convocado para abordar el conflicto.

Según el sindicato CCOO, los comités explicarán al Govern que exigen a Nissan que garantice los puestos de trabajo de las plantas que tiene en Cataluña y en el resto de España, y denunciarán la vulneración de derecho a huelga por parte de la multinacional nipona, lo que motivó que el pasado martes interpusieran una demanda judicial contra la dirección.

Los trabajadores consideran que la decisión de la compañía de volver a incluir en el ERTE a empleados que se habían reincorporado a la fábrica tras el parón obligado por el coronavirus es contrario a la legalidad.

Los afectados por el desempleo temporal son un millar de personas que estuvieron trabajando en la planta de Zona Franca hasta que se quedaron sin piezas por efecto de la huelga indefinida en el centro de Montcada i Reixac.

Estos trabajadores habían salido del ERTE el pasado lunes, 4 de mayo, para retomar la actividad en la planta de Zona Franca, aunque dos días después ésta se paralizó por la falta de piezas que llegaban desde la fábrica de chapado de Montcada i Reixac, muy afectada por la huelga indefinida convocada por los sindicatos.

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