El precio de la luz se ha tensionado en la recta final del año. A pesar de haber vivido un 2024 tranquilo en el coste por encender nuestros electrodomésticos, noviembre y diciembre han virado negativamente y el precio del megavatio a la hora se ha disparado por encima de los 100 euros con cierta normalidad.
La falta de inestabilidad en la metereología y el nulo rendimiento de las renovables para dotar al mix eléctrico de energía barata ha provocado que el sistema nacional tire del gas, siempre más caro, para poder generar electricidad. Además de la inestabilidad del precio, los usuarios encontrarán importantes novedades en la factura eléctrica que modificará, a buen seguro, el total a pagar a fin de mes.
A partir del próximo 1 de enero, el recibo tendrá un incremento en el impuesto por el valor añadido. La última reducción del IVA de la luz expiró el 31 de diciembre de 2023, y, desde el 1 enero de 2024, el tipo impositivo aplicado a la luz subió de nuevo al 10%. En la actualidad, se mantiene esta cifra, pero a partir de 2025 volverá a recuperar el 21%.
No obstante, si el precio medio del mercado eléctrico del mes anterior a la realización de la lectura del consumo se sitúa por debajo de los 45 euros/MWh, el IVA a la electricidad se ve incrementado hasta el 21%, independientemente de que los consumidores tengan contratado su suministro a precio fijo o indexado al mercado diario.
En 2025, también se estabilizará el Impuesto Especial a la Electricidad. A finales de 2023 se situaba en el 0,5%, y con la entrada en 2024 escaló hasta 2,5% para subir al 3,8% en el segundo trimestre y terminar a lo largo del año de alcanzar el nivel de 5,11%.
Cambios en la PVPC
Por otra parte, en la tarifa PVPC también se producirán importantes cambios. Recordemos que dicha opción es la escogida por unos 8,5 millones de españoles. Durante la crisis energética, que propició que los precios se incrementaran considerablemente, los usuarios de dicha tarifa vieron como el recibo se encareció considerablemente.
El Ejecutivo diseñó una nueva medición para que no se produjeran picos y el coste se estabilizara. Dichos hogares, por tanto, se benefician de la desindexación parcial de los mercados al contado al incorporar referencias de los mercados de futuros que aportarán más estabilidad a los precios finales de los consumidores.
La tarifa, desde el año pasado, es híbrida y en 2024 la parte fija era del 25% del coste total del Mwh. Ahora, con la entrada del nuevo año, la parte fija pasará a ser del 40% y del 55% en 2026.
El objetivo, según el propio Ministerio de Transición Energética, será el de para obtener mayor seguridad sobre el retorno de sus inversiones, está modificación conllevará una mayor estabilidad en las facturas de la electricidad de los consumidores.
Modificación del bono social
Las ayudas del Gobierno tampoco escapan a las novedades. En concreto, el Bono Social sufrirá modificaciones. Según se recoge del Real Decreto-ley 18/2022, de 18 de octubre, se incluirán nuevos beneficiarios.
Por ejemplo, se aumentará el descuento hasta el 65% para consumidores vulnerables que cumplan los requisitos establecidos, como tener ingresos anuales inferiores a dos veces el IPREM (16.800 € en 14 pagas) y superiores a 1,5 veces el IPREM (12.600 euros).
Además, la tarifa eléctrica se reducirá hasta el 80% para los consumidores vulnerables severos. Además, también tendrán el mismo descuento aquellos hogares que se encuentren en riesgo de exclusión social, aquellas unidades que sean atendidos por servicios sociales.
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