Pedir cita previa con la Administración es misión imposible. Así lo ha reflejado la OCU en su último estudio sobre los tiempos de espera a la hora de pedir cita previa, dejando en claro que una de cada tres peticiones no llega a materializarse. Un problema que se lleva registrando durante los últimos años por la falta de recursos que presentan las comunidades autónomas y provincias donde tienen que reenviar la tramitación a otra localidad o municipio.
Una situación preocupante y más cuando entra en la ecuación las pensiones y subsidios por desempleo. Y es que los propios datos avalan el paradigma que se vive en España. El paro registrado se ha situado en 2.734.831 personas durante el mes de noviembre de 2023, lo que supone un 0,89% respecto al mes anterior, es decir, 24.573 personas menos.
En cuanto a las pensiones, en España hay un total de 4,61 millones de hombres pensionistas y de 4,49 millones de mujeres pensionistas. Si se compara con el número de ocupados, en todo el territorio español habría cerca de 8,81 millones de pensionistas frente a los 19,5 millones de ocupados.
Tal y como indica la OCU, la entidad realizó un total de 1.800 citas en 25 ciudades españolas para comprobar los trámites y el tiempo de espera en cada uno de ellos. 48 de las solicitudes que se enviaron para gestionar la pensión de jubilación no tenían disponibilidad, solamente 50 recibieron citar en menos de 6 días, 7 en citas para más de 6 días y 195 obtuvieron la cita en otra localidad.
Los datos para el subsidio de desempleo tampoco son positivos, de hecho dejan mucho que desear, al igual que las pensiones. Un total de 46 solicitudes se quedaron en el limbo por falta de disponibilidad, 124 obtuvieron cita en menos de 6 días y 130 cita en más de 6 días. Hay que recalcar que para hacer efectivo el paro y la ayuda económica, los solicitantes tienen un periodo de 15 días desde el despido para solicitar la subvención. Esto quiere decir que el 15,13% no habrían gestionado los papeles debido a la falta de recursos y disponibilidad de la Administración.
Las trabas que denuncia la OCU en la cita previa de las pensiones, subsidio por desempleo, renovación del DNI...
"De esas 1.800 solicitudes, conseguimos la cita deseada en dos de cada tres casos, aunque no necesariamente muy próxima en el tiempo. En otro 4 % de los casos, no fue posible pedirla al no existir un sistema de solicitud, sino que había que ir directamente a realizar el trámite. Sin embargo, en un 18 % de las ocasiones no nos dieron cita o la cita era en una localidad distinta (11 %), lo que implicaba un desplazamiento. Por ejemplo, solicitamos la cita en Palma y nos la dieron en Mahón. En conjunto, hubo problemas en un tercio de los intentos", explica la OCU en su estudio.
¿Cuáles son las comunidades autónomas donde es más difícil gestionar una cita previa con la Administración? Valencia, Alicante y Madrid son las provincias que tienen mayores dificultades, mientras que Granada y Oviedo son las capitales donde es más fácil encontrar un hueco. En el caso particular de Guadalajara se notificó que una de cada 3 peticiones no fueron tramitadas porque no tenían un sistema de petición, por lo que no hizo falta pedirlas mediante un sistema de reserva.
Otro de los factores disruptivos de la ecuación es la larga espera para la cita. Por norma general, en uno de cada cinco intentos la espera se alarga más de dos semanas, siendo las mayores esperas para renovar el DNI donde el plazo se alarga a casi 11 días.
La OCU indica que para el resto de las gestiones relaciones con la Administración el tiempo de espera y la tramitación es menor: "Para la solicitud de la fe de vida (Ministerio de Justicia) la demora alcanza los 10 días. En algunas, la espera media fue mucho mayor: en Soria y Bilbao el plazo medio para tramitar la fe de vida se alargó 43 y 40 días de espera media, respectivamente; y La Coruña llegó a los 32 días de espera para renovar el DNI".
Para terminar la OCU, ante la preocupante situación de la cita previa para tramitar las pensiones y subvenciones por desempleo, exige una serie de medidas de cara a mejorar y agilizar la burocracia que gira en torno a estos procesos: garantizar en sus cartas de servicios la obtención de una cita al menos en el 95 % de los casos y con una demora máxima de menos de 5 días laborables (o 7 naturales), facilitar a los ciudadanos la identificación digital con campañas informativas y ayuda personalizada (en centros de mayores, por ejemplo) y reservar cupos de citas para ciudadanos vulnerables (mayores, discapacitados…), que pueden tener más dificultad.
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