Los bancos y grupo Damm confían en sacar adelante la Junta de hoy con un quorum superior al 70%. Si esto fuera así, la hoja de ruta manejada es: nombramiento de Juan Manuel Urgoiti como presidente no ejecutivo, búsqueda de un Consejero Delegado independiente para que gestione el día a día de la compañía y presentación de plan financiero a mediados del mes que viene que, entre otras cosas, ponga orden con el entramado de filiales no consolidables.
Una vez entonces se espera que sea levantada la intervención concursal y se pueda negociar con los bancos la quita. Podría incluso rozar el 80%, una cifra espectacular. Vozpópuli informó hace semanas que las expectativas de quita iban subiendo cada vez más, situándose muy por encima del 50% que se manejaba.
Establecido el porcentaje de quita, se procederá a capitalizar deuda por parte de los acreedores, lo que conllevará una inevitable dilución de accionistas, pero no todo quedará ahí. El equipo de Damm contempla la entrada de ‘dinero fresco’.
Así, fuentes de mercado indican que hay “mucha gente interesada en entrar” si se saca adelante la refinanciación. El proyecto es viable, tal como se ha esforzado en subrayar Deloitte y Pescanova tiene unos activos magníficos en ultramar, algunos de los cuales todavía no han comenzado a rendir.
Se prevé una reducción de personal en lo tocante a gestión financiera de las filiales (“Pescanova tenía hasta seis administraciones paralelas”, dicen fuentes conocedoras del caso) pero no corren peligro, en teoría, los trabajadores de las plantas.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación