Los fondos soberanos son actores clave en el panorama de la inversión internacional y en la transición verde. De acuerdo al ranking de SWFI (referente en análisis de fondos soberanos), al cierre de 2022 el mayor fondo soberano del mundo por activos totales era el Fondo de Pensiones del Gobierno de Noruega (NBIM), seguido por el China Investment Corporation y el SAFE Investment Company (estos dos de Asia).
Desde el 2020 ha habido algunos cambios destacados en el equipo de inversiones de Norges Bank, como la entrada de Nicolai Tangen, quien se incorporó a NBIM como director ejecutivo el 1 de septiembre de 2020, proveniente de AKO Capital, que fundó en 2005. Pedro Furtado Reis y Daniel Baltasar fueron nombrado co-directores de inversiones de renta variable el 1 de julio de 2022, aunque con una antigüedad de más de 10 años en NBIM en otras áreas. Malin Norberg, co-directora de inversiones de Estrategias de Activos, desde 1 de abril de 2023, cuya labor es la selección de valores de gestión externa, junto con Geir Oivind Nygard, nombrado en octubre de 2020.
A pesar de todos esos cambios, durante 2020 y 2021 el fondo logró rentabilidades anuales positivas, en 2022 no se libró de la alta correlación de los mercados y tuvo una fuerte caída, superior al -14%. Aunque en 2023 alcanza una rentabilidad del 10%, el tercer trimestre ha sido muy complicado.
A finales del tercer trimestre, el valor del mercad del fondo era de 14.801 mil millones de coronas (1.255,73 mil millones de euros), habiendo disminuido en 499.000 millones de coronas (42.336 millones de euros), debido tanto a la rentabilidad de las inversiones como al movimiento de divisas que no fueron compensados por las entradas:
Un 3T23 complicado en las inversiones de NBIM
NBIM ha reportado rentabilidades trimestrales negativas del -2.1%, proveniente de todas las clases de activos así como por movimiento de divisa, debido al fortalecimiento de la corona noruega.
Por clase de activos, la rentabilidad de las inversiones en acciones del fondo fue del -2,1%, en cuanto a la renta fija fue del -2,2%, mientras que las inversiones en bienes raíces no cotizadas registraron una rentabilidad -3,3%, al que se suman las infraestructuras de energía renovable no cotizadas con -2,4%. A pesar de todo ello, el rendimiento del fondo fue 0.17 puntos porcentuales mejor que el rendimiento del índice de referencia.
Según se lee en el informe de NBIM "el mercado de valores registró un trimestre más débil en comparación con los dos trimestres anteriores. Fueron especialmente los sectores tecnológico, industrial y de consumo discrecional los que contribuyeron negativamente a la rentabilidad", afirma el director general adjunto, Trond Grande.
La corona se fortaleció frente a varias de las principales monedas durante el trimestre. Los movimientos de divisas contribuyeron a una disminución del valor del fondo de 264 mil millones de coronas. En el tercer trimestre, las entradas al fondo ascendieron a 139 mil millones de coronas.
El fondo tenía un valor de 14.801 mil millones de coronas al 30 de septiembre de 2023, invertido en
- 70,6% en acciones
- 27,1% en renta fija
- 2,2% en bienes raíces no cotizados y
- 0,1% en infraestructura de energía renovable no cotizada.
De momento NBIM no ha desglosado ni regiones y tampoco posiciones que más les hayan penalizado. Sin embargo, si vemos las mayores posiciones en renta variable que mantenían en cartera al final del 2T23, vemos que las de mayor contribución a las caídas fueron ASML, LVMH, Apple y Taiwán Semiconductores, como se aprecia en la siguiente tabla:
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