Cataluña ha sido la comunidad autónoma más perjudicada por la prórroga de los presupuestos del Gobierno de Mariano Rajoy, ya que las cuentas de Pedro Sánchez incluían transferencias por valor de 350 millones con las que la Generalitat tenía previsto afrontar los gastos de 2019. Ahora que no recibirá esa cuantía extra, tiene más difícil cumplir con el objetivo de déficit (fijado en el -0,1% del PIB para todas las comunidades).
Esta comunidad cerró 2018 con un desfase presupuestario de -0,4%, con lo que necesita hacer un ajuste de tres décimas este año para cumplir con el objetivo, algo que la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) considera "factible" (que no probable), aunque advierte de que Cataluña cuenta ahora "con menos holgura al empeorar las perspectivas por el rechazo del proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE)".
"Es mucho más ajustado (...) al no considerar los ingresos por importe global de 350 millones que el proyecto de PGE recogía en concepto de transferencias para financiar la policía e inversiones en la comunidad, en virtud del Acuerdo de la Comisión Mixta de Asuntos Económicos y Fiscales adoptado en septiembre de 2018", señala la Airef en su informe sobre los Presupuestos de esa comunidad.
Además de no recibir estas transferencias, las cuentas catalanas se verán afectadas como las de otras comunidades si no se les compensa -como estaba previsto en los presupuestos- por el cambio en el Suministro de Información del IVA (SII), que provocó que en 2017 las comunidades autónomas ingresaran un mes menos de IVA y el Gobierno quería compensar este año con una mensualidad más.
Si finalmente no se toma ninguna medida para compensarlo, para Cataluña "el cumplimiento del objetivo de estabilidad en 2019 pasaría a considerarse improbable", ya que esa compensación podría aportar dos décimas al PIB regional.
El buen cierre de 2018 compensa los menores ingresos
La Airef únicamente ha empeorado sus perspectivas de cumplimiento de déficit para Cataluña, La Rioja e Islas Baleares, y se ha pronunciado por primera vez este año sobre los presupuestos de la Comunidad Valenciana, en los que advierte de un enorme despilfarro que provocará que el déficit (el más alto de toda España) no sólo no baje sino que se incremente.
En el caso de las Islas Baleares y La Rioja, la Airef ha empeorado su escenario no por el impacto de la prórroga presupuestaria sino porque el cierre de 2018 ha sido peor del que estaba previsto, ya que el gasto ha sido más elevado del esperado.
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Para Castilla-La Mancha, la Comunidad de Madrid y la Región de Murcia, la Airef ha mantenido su previsión -ya que no ha habido cambios significativos-, mientras que ha mejorado las de Andalucía, Aragón, el Principado de Asturias, Canarias, Cantabria, Castilla y León, Galicia, Extremadura, Navarra y el País Vasco.
A estas diez comunidades también les ha penalizado la no aprobación de los presupuestos expansivos de Sánchez, pero todas -excepto Aragón- han tenido un cierre de año mejor del previsto y esta última ha aprobado unos presupuestos autonómicos nuevos en los que aplica medidas para contener el gasto.
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