Economía

El socio americano del Real Madrid entra en la puja por los derechos del Barça

Sixth Street está interesado en hacerse con parte del negocio televisivo que los culés han sacado a subasta para superar su delicada situación. Key Capital, cercana a Florentino Pérez, operaría entre las partes

Sixth Street, flamante socio del Real Madrid en la explotación del Santiago Bernabéu, ha entrado en la puja por los derechos televisivos del Fútbol Club Barcelona, según ha podido saber Vozpópuli a partir de fuentes financieras.

De acuerdo a las fuentes consultadas, el fondo estadounidense estaría interesado en hacerse por unos 200 millones de euros con la cesión del 10% de los derechos de emisión en La Liga del Barça durante 25 años. A preguntas de este diario, ni el private equity americano ni el club que preside Joan Laporta han hecho comentarios.

Fuentes del mercado sugieren que la Junta pretendería una cantidad superior y/o reducir los años de la cesión, si bien la oferta de los estadounidenses estaría dentro de las expectativas. Informantes cercanos al Barça inciden en que lo más probable es que el club vaya transaccionando los derechos en tramos de hasta un 10%. Cesiones por encima de ese porcentaje requerirían la expresa autorización de los bonistas.

La intención del club blaugrana es solventar idealmente un roto de 600 millones de euros antes del próximo 30 de junio para cerrar el ejercicio en positivo a ojos de La Liga y así poder acometer fichajes la próxima temporada. Con ese objetivo, la Junta liderada por Laporta ha activado una serie de operaciones, entre ellas, la cesión por un máximo de 25 años de hasta una cuarta parte de los derechos televisivos del club en La Liga, una transacción en la que los culés estarían renunciando a unos 1.150 millones de patrimonio futuro, según estimaciones del mercado.

El Real Madrid y Florentino Pérez, nexos del Barça con Sixth Street

Fuentes cercanas a la operación puntualizan que el Barça trabaja de la mano con la firma de inversión Key Capital, cercana a Florentino Pérez. Dicha entidad asesoró al Real Madrid en la reciente cesión del 30% del negocio del Santiago Bernabéu durante 20 años al propio Sixth Street -el acuerdo inicial entre las partes era de un 20% por 25 años-.

En el caso del Real Madrid, el fondo americano irrumpió a través de Legends, especializada en la explotación de recintos deportivos y merchandising. El propio Barça tiene ahora a la venta hasta el 49% de su división de comercio en tiendas, BLM, por la que espera ingresar entre 200 millones de euros (a menor participación) y 300 millones (por no más del 49%). Además, ha proyectado una reforma de su estadio, el Camp Nou, que estaría lista en 2026.

Antes de invertir en el Bernabéu, Sixth Street se encomendó al asesoramiento de JP Morgan, la misma entidad que mantiene viva una línea de financiación de 4.000 millones de euros para activar la Superliga europea liderada por el propio Florentino Pérez.

El proyecto de la Superliga encabezado por el presidente del Real Madrid con el Barça como uno de sus socios pende ahora de un fallo de la Justicia europea

Al presidente merengue le interesa que el Barça mejore su situación económica ya que representa un socio bisagra de cara al lanzamiento de la Superliga, según señalan a este diario fuentes próximas al también mandatario de la constructora ACS.

Por lo pronto, el equipo blaugrana ha seguido la estela del Real Madrid y ha renunciado definitivamente a aliarse con el socio de La Liga, el fondo CVC Capital Partners, que ofrecía a los culés unos 270-280 millones de euros a cambio del 10% de los derechos televisivos durante 50 años.

El proyecto de la Superliga encabezado por Florentino pende ahora de un fallo de la Justicia europea, que tendrá que posicionarse sobre la potestad de los clubes para impulsar una competición con fines lucrativos al margen del establishment de UEFA. El Tribunal de Justicia de la Unión Europea celebrará su primera vista durante los días 11 y 12 del próximo mes de julio.

Como avanzó este medio, si el Barça decidiera desvincularse de la empresa presidida por Pérez antes de que acabe el proceso judicial tendría que pagar alrededor de 300 millones de euros en concepto de penalización.

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