El pasado jueves, Repsol ‘avisaba’ al PSOE y Sumar que su acuerdo iba en contra del proyecto industrial de la compañía en España. Algunos lo interpretaron como 'una amenaza' en plenas negociaciones para formar Gobierno. Pero, este lunes, se ha entrado en detalles. La empresa deja en ‘stand by’ un proyecto de 200 millones en Bilbao, como informaba el presidente de Petronor, y va de la mano, según ha podido saber Vozpópuli, de las inversiones valoradas en 1.250 millones en proyectos industriales similares en Cartagena y Tarragona.
Una decisión que se produce por la incertidumbre tanto jurídica como fiscal a la que se enfrentan en el país. El principal es su proyecto de ‘ecoplanta’ en Tarragona valorado en 750 millones. Se trata de la primera planta diseñada que se iba a levantar en España para tratar y transformar residuos sólidos urbanos no reciclables a metanol circular. Repsol había cerrado una alianza con la tecnológica Enerkem y el industrial Agbar para lograr que esta 'ecoplanta' operara en 2026. La energética anunció en 2021 que con este proyecto conseguiría reciclar 400.000 toneladas de residuos al año, que corresponde al consumo anual de 800.000 personas.
En Tarragona también se sitúa otro de los proyectos que queda en observación de Repsol. La petrolera que lidera Josu Jon Imaz pretendía instalar en su refinería "el mayor electrolizador de España", según anunciaba, con una capacidad de 150 megavatios (MW), cuya puesta en marcha también situó en 2026.
El proyecto, valorado en 300 millones, tenía una segunda fase que comenzaría a partir de 2027 y con una capacidad de producción de hidrógeno renovable se incrementaría hasta 1.000 MW. Repsol logró incluso fondos europeos del programa Innovation Fund.
Un proyecto similar al que tenía trazado en su refinería de Cartagena. Con una inversión de unos 215 millones de euros y la generación de alrededor de 1.100 empleos en las diferentes fases de construcción y puesta en marcha, Repsol, junto con Enagás Renovable y Engie, quería tener listo este proyecto en 2025. También la Comisión Europea calificó este proyecto como ‘Estratégico y de Interés Común Europeo’. Ahora se queda en cuarentena.
Repsol da el primer paso en Bilbao
Tarragona y Cartagena son los siguientes pasos a lo que anunciaba este lunes el presidente de Petronor, Emiliano López Atxurra. Desde la filial de la energética que dirige Josu Jon Imaz se indicaba que la planta industrial para producir a gran escala combustible sintético en Bilbao está en "stand-by" por la ausencia de un marco jurídico "previsible" en España.
Un proyecto que es la tercera fase de lo que quiere hacer Repsol con el hidrógeno en Bilbao. El primer paso ya está operativo con un electrolizador de 2,5 MW, con una capacidad de generar 350 toneladas anuales de hidrógeno renovable para uso industrial principalmente en la refinería.
Hasta 2025, se espera que se una a esta producción un electrolizador de otros 10 MW y, hasta este lunes, se contaba con 100 ‘megas’ adicionales para este plan.
La tercera fase de Muskiz necesita un capital de otros 200 millones de euros que se quedarán, de momento, en las arcas de la energética hasta tomar una decisión final. Su objetivo era descarbonizar su gran refinería de Petronor en Muskiz (Vizcaya) y proveer a sus clientes industriales del ‘Gran Bilbao’.
El bloqueo de estos proyectos industriales en tres de las cincos refinerías de Repsol en España son los primeros pasos ante una incertidumbre por las decisiones políticas que no le aseguran el retorno de las inversiones. La compañía quiere posicionarse en toda la cadena de valor del hidrógeno renovable, con una inversión prevista de 2.549 millones de euros hasta 2030.
Repsol insiste en que su apuesta son todas las tecnologías que le permitan alcanzar una potencia de 552 MW en 2025 y 1,9 GW en 2030. La única duda ahora es si se harán, o no, en España
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación