Sabadell guarda en el cajón, al menos en el corto plazo, la revisión estratégica que inició recientemente para valorar qué hacer con su filial de pagos. La entidad ha decidido suspender el sondeo que estaban realizando la consultora Deloitte y Barclays para una posible venta o la búsqueda de un socio especializado en el sector de pagos, según distintas fuentes financieras consultadas por Vozpópuli.
Fuentes oficiales de Sabadell prefirieron no hacer comentarios al respecto. Los asesores habían trasladado a potenciales compradores que la división de pagos, que se encarga de las transacciones de tarjetas del banco, tenía un valor aproximado de unos 300 millones de euros. El banco no llegó a dar el mandato formal para ninguna de las opciones estudiadas en dicha revisión estratégica, que también contemplaba potenciar la filial dentro de Sabadell para no perder cuota de mercado en este segmento. No obstante, no se descarta que la entidad recupere este plan en unos meses, según fuentes próximas al proceso.
El negocio de tarjetas de crédito y débito y los servicios de pago minoristas de Sabadell está en crecimiento, pero lo hace a un ritmo inferior al de sus competidores. Esta tendencia se traduce en una pérdida de cuota de mercado. A cierre de 2021, la entidad declaraba una cuota del 7,6% en facturación de tarjetas, una caída de 14 puntos básicos respecto a 2020, y del 16% en Terminales de Punto de Venta (TPV), un descenso de casi un punto porcentual. Esta tendencia podría cambiar este año, ya que la producción de tarjetas creció un 27% en el primer trimestre y el segmento de TPV movió 9.500 millones, un 36% más que un año antes.
Sabadell decidió revisar su estrategia en el negocio de pagos como vía para seguir mejorando en eficiencia. En el último año fue el banco español cotizado que más redujo su nivel de costes sobre ingresos. A marzo de este año, según las últimas cuentas publicadas, la tasa de eficiencia, mejor cuanto más baja, rozó el 48%, frente al 54% de un año antes. Es decir, necesita gastar 48 euros para obtener 100 euros de ingresos. Se trata de la tasa eficiencia más baja que registra el banco desde diciembre de 2013.
Otras operaciones corporativas
El banco también se planteó el año pasado la venta de TSB, su filial británica, aunque finalmente desistió tras rechazar una oferta de unos 1.200 millones de euros del banco británico Co-operative Bank. De hecho, TSB se ha convertido en un pilar para Sabadell y ya contribuye con 19 millones a la cuenta, tras ganar un 131% más. La filial británica acumula cinco trimestres consecutivos aportando ganancias a las cuentas del grupo.
César González-Bueno, consejero delegado de Sabadell, rechazó en la última presentación de resultados del primer trimestre cualquier tipo de operación corporativa "como mínimo" hasta que finalice el plan estratégico de la entidad en 2023. De hecho, la cúpula considera que no distraerse con "aventuras" como compras o ventas es una de las principales razones que explican la buena marcha del negocio. El banco triplicó las ganancias en los tres primeros meses del año y apunta a un beneficio de 700 millones de euros para 2022.
Sabadell rompió conversaciones oficiales para una integración con BBVA a finales de 2020 como respuesta a la incertidumbre económica por el Covid. Pero los equipos directivos de ambas entidades dieron al traste con la operación por discrepancias en el precio. "El tiempo nos ha dado la razón de seguir en solitario", defendió el consejero delegado en rueda de prensa el pasado mes de abril, cuando cumplía justo un año desde su nombramiento como primer ejecutivo de la entidad.
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