Siemens Gamesa ha revisado a la baja sus previsiones para 2021 hasta situar los ingresos entre 10.200-10.500 millones de euros tras provisionar 229 millones para proyectos onerosos por el alza de precios de las materias primas y los costes de lanzamiento de su plataforma 5.X, sobre todo en Brasil.
Con todo ello, la compañía ha ajustado además el margen ebit antes para el ejercicio 2021 a un rango de - 1% a 0 %, según ha avanzado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El grupo de energías renovables señala que el impacto de estos factores se ha visto exacerbado por la pandemia, especialmente en países como Brasil donde la compañía se enfrenta a "deficiencias" en la cadena de suministro y a "cuellos de botella" relacionados con la ejecución.
Ello ha obligado, por tanto, a revisar el cierre preliminar del tercer trimestre del ejercicio 2021 y a ajustar sus guías de mercado para el ejercicio 2021.
En agosto del pasado año, la compañía avanzó que esperaba retornar a márgenes positivos en 2021 y facturar entre 10.200 y 11.200 millones de euros.
Avance de resultados del tercer trimestre
Siemens Gamesa, que presentará los resultados definitivos el próximo 30 de julio, ha avanzado las cuentas preliminares del tercer trimestre, que apuntan a unas ventas de 2.700 millones, a un ebit negativo en 150 millones, una deuda neta de -800 millones, y una cartera de pedidos total de 32.600 millones.
De hecho, la reevaluación de la rentabilidad de la cartera de pedidos de aerogeneradores como consecuencia de los factores antes mencionados, ha dado como resultado provisiones por un importe estimado de 229 millones en este trimestre.
El impacto se concentra fundamentalmente en los primeros proyectos con la plataforma 5.X de Siemens Gamesa en Brasil con entrega en los ejercicios 2022 y 2023.
La entrada de pedidos durante el trimestre ascendió a 1.500 millones de euros, viéndose afectada por la volatilidad del mercado de eólica marina "offshore".
Cabe recordar que en los nueve primeros meses de su ejercicio fiscal de 2020 (octubre-junio), las ventas del grupo retrocedieron el 9,2 % hasta los 6.615 millones, el ebit arrojó un saldo negativo de 264 millones y la cartera sumó 31.500 millones.
Asimismo, la compañía indica que continúa sus esfuerzos por alcanzar una rentabilidad sostenible y que las medidas en curso sobre los costes y de eficiencia se intensificarán, especialmente para la plataforma 5.X.
Adicionalmente, ha señalado que sigue haciendo progresos en el programa centrado en la transformación de la unidad de negocio "onshore" y que el desempeño de las unidades de negocio "offshore" y Servicios sigue siendo sólido.
A este respecto, ha apuntado que el potencial a largo plazo de la compañía y su marco estratégico se mantienen sin cambios dado el papel de la energía eólica en la transición energética y su fuerte posicionamiento en todos los segmentos de mercado.