El Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y sus incrementos en los últimos años otorgan uno de los argumentos más relevantes de los sindicatos de la patronal Anged (El Corte Inglés, Ikea o Carrefour) para solicitar una subida salarial "potente" para las plantillas de estas empresas. En medio del debate sobre un nuevo aumento del SMI para 2023, y con la demanda de los representantes de los trabajadores de situarlo en 1.082 euros sobre la mesa, los salarios de Anged también serán discutidos en la negociación de su nuevo convenio, que comenzará a partir de enero.
Hasta el momento, la posición de los sindicatos que estarán presentes en la mesa de negociación del convenio de El Corte Inglés, Ikea o Carrefour es casi unánime. Tanto Fasga como Fetico y CCOO abogan por pedir en el nuevo convenio una subida salarial cercana al 4,5% anualmente durante los cuatro años que engloba el convenio. Según los cálculos sindicales, ese aumento llevaría al sector a un salario medio del trabajador base cercano a 18.000 euros al final de la vigencia de convenio, que sumado a dividendos e incentivos situaría en 20.000 el salario medio real en estas empresas.
"En 2017, la diferencia entre el salario base del grupo de profesionales y el SMI ascendía a un 45%. Con los incrementos que ha habido del SMI ene estos últimos años y el poco que hemos tenido nosotros en el convenio colectivo, la diferencia se ha reducido a menos de un 10%", apuntan fuentes de Fasga consultadas por Vozpópuli, que insisten: "Si a eso además sumamos que el salario más habitual en España son 18.500 euros, queremos tener un incremento salarial muy potente". Actualmente, el salario base de los trabajadores de Anged "oscila en unos 15.500 euros", cuentan.
Un nuevo incremento del SMI supondría así un acortamiento de distancias con el salario base de estas empresas, algo que los sindicatos rechazan. "Tenemos que incrementar los salarios para asemejarnos al salario más habitual en España, pero además para seguir manteniendo una diferencia importante sobre el SMI para que haga competitivo al sector de cara a retener a los trabajadores, porque si no va a dar igual estar trabajando a este sector comparado con otros sectores", insisten desde Fasga.
Del SMI... a Mercadona y Lidl
No es, sin embargo, el único argumento que utilizarán los sindicatos. Además del incremento del SMI, los representantes de los trabajadores presentarán a Anged las subidas salariales en otras compañías del sector de la distribución, como pueden ser Mercadona, Lidl o DIA.
En el caso de estas últimas, la cadena que dirige Juan Roig aprobó una subida de sueldo del 6,5% para todos sus trabajadores a comienzo del año -recogida en su convenio-, Lidl firmó en julio su nuevo acuerdo para los próximos cuatro años, que incluyó un incremento salarial un 7% en 2022, un 3,5% en 2023 y un mínimo del 3% en 2024 y 2025; y DIA firmó subir los sueldos entre un 8% (para el módulo C y siguientes) y un 12% (para el módulo A) en 2022, siguiendo con la horquilla de incremento del 5 al 9% en 2023 y del 3% en 2024.
El 31 de diciembre finaliza el actual convenio de Anged, que se concibió como un "convenio puente" para estos dos años, 2021 y 2022. Con una subida salarial del 2% en total -un 1% cada año-, la patronal de los grandes almacenes y los representantes de los empleados pretendían así esperar a que finalizara la pandemia y que la vuelta al consumo le permitiera volver a renegociar los sueldos. Con una afectación cercana a 230.000 trabajadores, será uno de los convenios más relevantes de los que comenzarán a discutirse en enero.
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