“Enhorabuena, José Luis”. Este ha sido el mensaje que ha recibido en su móvil el flamante nuevo gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá, de varios de los principales banqueros del país, según ha podido saber Vozpópuli de fuentes solventes del sector financiero. Un movimiento en privado para tratar de ‘ganarse’ al polémico sucesor de Pablo Hernández de Cos y antes de que se den cita en la sede central en Cibeles en el acto de toma de posesión.
Escrivá tiene previsto jurar o prometer su cargo ante Felipe VI este viernes en el Palacio de la Zarzuela. Pero aún se busca fecha para su presentación en público ante el sector bancario. La intención del Banco de España es hacerlo la semana que viene, aunque será “complicado”, como admiten fuentes próximas al supervisor, encajar las agendas cuando el exministro tiene que acudir el jueves a Fráncfort para participar en su primer consejo de gobierno del Banco Central Europeo (BCE), en la que salvo sorpresa se decidirá retomar las rebajas de tipos.
"Los banqueros no olvidan que Escrivá fue el ideólogo del impuesto al sector bancario a finales de 2022 bajo la premisa de que las entidades tendrían ingresos extra por las subidas de tipos
La cita a más tardar sería la semana del 16 de septiembre, y los banqueros ya están preparando el terreno antes del primer encuentro en público con Escrivá. Distintos ejecutivos de primer nivel han enviado mensajes de texto al nuevo gobernador felicitándole por su puesto en un intento de iniciar con buen pie la nueva etapa.
En el sector se temía desde hacía tiempo que Pedro Sánchez acabara imponiendo como gobernador al exministro, de reconocido prestigio económico, pero con un carácter especialmente combativo y con un claro perfil político tras sentarse en el consejo de ministro durante los últimos cuatro años.
Dudas sobre la independencia de la institución
En privado, los principales ejecutivos advierten de que la independencia del Banco de España se pone en riesgo al nombrar a un ministro al frente del supervisor. Una circunstancia que no ocurría desde hacía más de cuatro décadas. Tampoco perdonan que el exministro fuera el principal ideólogo del impuesto bancario que diseñó el Gobierno a finales de 2022 justificándolo en los ingresos extra por el aumento del precio del dinero y que tiene visos de hacerlo permanente.
Ahora bien, algunos banqueros no descartan que Escrivá acabe reconvirtiéndose en un “gobernador crítico” precisamente para hacer valer su independencia. “Es muy cabezón y tiene una capacidad notable de cambiar de gorro con facilidad. Si cree que tiene que dar señales de que es independiente, podría optar por un perfil duro”, advierten fuentes próximas al exministro.
“Hay pocos economistas como Escrivá en España”, defendió a capa y espada Pedro Sánchez este miércoles en una declaración institucional tras hacer oficial el nombramiento del nuevo gobernador. Pero, como resuena en los últimos días en los despachos de los banqueros, parte con un doble hándicap: salta desde el consejo de ministros y su designación no se ha pactado con el principal partido de la oposición.
Para Escrivá, según las fuentes consultadas, el regreso al Banco de España como máxima autoridad de la institución supone el “culmen” a su carrera. El exminstro regresa al organismo monetario tras ocupar la Subdirección del Departamento de Estudios Monetarios y Financieros y liderar la Unidad de Investigación Monetaria.
Bajo la lupa de la oposición
El papel del nuevo gobernador no pasará desapercibido y los partidos de la oposición medirán con lupa cualquier actuación del Banco de España. Dentro de la casa tampoco esconden su malestar por su perfil político, como reconocen fuentes internas del organismo, y se recuerda que Moncloa ha hecho caso omiso al artículo 130 de los tratados de la Unión Europea, en los que los países que conforman la zona común se comprometen a “no tratar de influir” en los bancos centrales nacionales, en este caso, el Banco de España.
Los movimientos de Sánchez para copar el supervisor tampoco han pasado desapercibidos para el Fondo Monetario Internacional (FMI), que en julio advertía de que la injerencia política “socava” la independencia del Banco de España en plena renovación de la cúpula.
Objetivo: copar la cúpula
“La representación de personas designadas por políticos en los órganos de decisión del BdE también tiene el potencial de causar o ser percibido como causante de interferencia gubernamental que podría socavar la independencia operativa del BdE”, ponía de manifiesto el FMI en una nota técnica publicada en julio tras su visita a España para evaluar al sector financiero, cuyo examen finalizó el día 12 del citado mes.
Tras romperse el pacto no escrito con el PP para renovar la cúpula, Moncloa prepara el último paso para copar la institución con el nombramiento de una subgobernadora. Y todo después de que ayer se conociera que Sánchez y Aragonés pactaran que Jordi Pons ocuparía el sillón vacante en el consejo que corresponde a la denominada 'cuota catalana'.
