La jornada de reuniones bilaterales del presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, con CEOE, Cepyme, CCOO y UGT ha terminado con la previsible coincidencia con las patronales en la necesidad de realizar una rebaja de impuestos para paliar los efectos de la inflación y con un acercamiento a los sindicatos que tanto populares como las centrales esperan cristalizar. Pero estas reuniones individualizadas se han saldado además con una novedosa aproximación a UGT. Su secretario general, Pepe Álvarez, se ha abierto a considerar puntos de encuentro con la propuesta económica del PP, centrada sobre todo en una rebaja temporal de impuestos a rentas medias y bajas.
Álvarez ha rechazado de nuevo una rebaja del IRPF, y así lo ha subrayado con claridad, incluso temporal y a rentas bajas, como propone el PP, ya que ha explicado que este tipo de reducción también impacta en el resto de rentas, que recorren el primer o los primeros tramos. Sin embargo, no se ha cerrado a otras posibilidades, en alusión a la rebaja del IVA que también propone el PP, medida por la que se le había preguntado. Y ha aludido a las rebajas del IVA y a impuestos de la electricidad que el Gobierno ya ha realizado.
En este sentido, también se ha referido al proceso de ajuste de precios que el Ejecutivo negocia con Bruselas para desacoplar el gas de la electricidad, la excepción ibérica, con lo que ha sugerido que según se resuelva este asunto serán necesarias más medidas.
Respecto al IVA, el PP plantea reducir el de la luz del 10% -que ha rebajado el Ejecutivo desde el 21%- al 4% y del gas del 21% al 4%. Asimismo, el Partido Popular incluye en su plan utilizar el 7% de los fondos comunitarios del Plan de Recuperación, cerca de 4.900 millones de euros para financiar deducciones que ya están en vigor o para nuevas rebajas impositivas.
El secretario general de UGT también se ha mostrado favorable a medidas de este tipo dirigidas a clases bajas y a articular ayudas similares al Ingreso Mínimo Vital. De nuevo en el IRPF, no es descartable que este sindicato se muestre favorable a otra de las medidas que Núñez Feijóo ha apuntado, establecer un impuesto negativo, con deducciones reembosables en cuota.
Álvarez ha dicho que mañana estudiará la propuesta en conjunto, por sí misma y no guiado por ningún sesgo ideológico ni el planteamiento que se supone que deba seguir UGT.
La posición del secretario general de CCOO, Unai Sordo ha sido más alejada del planteamiento del PP y ha centrado el grueso de sus comentarios a la salida de la reunión a criticar el pacto de los populares con Vox en Castilla y León. Sordo ha enmarcado el encuentro dentro de la normalidad institucional que debe presidir sus relaciones con el principal partido de la oposición. Y se ha mantenido firme en su crítica a las llamadas "rebajas generalizadas de impuestos", una frase que ya no ha repetido Álvarez, que sí ha reconocido que no es lo que propone el PP.
"Puntos de conexión"
Por su parte, Juan Bravo, vicesecretario de Economía del PP, ha visto "puntos de conexión con alguno de los sindicatos" en lo que respecta a rebajas fiscales a rentas bajas y ha señalado que "hay acuerdos", como en lo relativo al Plan de Recuperación.
Bravo no ha dado una respuesta clara a si el PP avala ahora la reforma laboral y de las pensiones como le han reclamado los sindicatos, pero sí ha insistido en que se abren a "escuchar, consensuar, acordar y ser escuchados". Y se ha mostrado proclive a recomponer sus propuestas según lo que les propongan los agentes sociales, entre ellas, las de rebajas de impuestos.
