Precariedad laboral: mujeres y jóvenes copan la mayoría de los contratos por horas en España

A cierre del segundo trimestre del año, 21.684.700 personas estaban ocupadas en España, según los datos de la última Encuesta de Población Activa publicada (EPA) por el Instituto Nacional de Estadística. Es la cifra más alta de la historia laboral de nuestro país. El número de afiliados a la Seguridad Social se mantiene por quinto trimestre consecutivo por encima de los 21 millones. Hay dos millones de ocupados más que al término del primer trimestre de 2019, por hacer una comparación homogénea entre dos fechas que no se han visto afectadas por condiciones extraordinarias.

Algo más de la mitad de los ocupados, concretamente el 53,47% del total, son hombres (11,595 millones) y el resto, el 46,53%, mujeres (10,089 millones). Más de 86% de los ocupados a finales de junio de este año trabajaban con jornada a tiempo completo: 18.742.100 personas. El 13,57% restante, 2,942 millones, lo hacían a tiempo parcial.

Uno de los aspectos que más llama la atención del análisis pormenorizado de las estadísticas del INE es que el trabajo con jornada a tiempo parcial es mayoritario entre las mujeres. De los 2,942 millones de ocupados parcialmente, 2,150 millones, el 73,09% del total, son mujeres y el 26,91%, poco más de 791.000 trabajadores, hombres. Es decir, tres de cada cuatro ocupados con jornada a tiempo parcial son mujeres. La principal razón de esta desproporcionalidad es que las mujeres tienen que compatibilizar mayoritariamente su trabajo con otras tareas que van desde el trabajo doméstico al cuidado de niños, adultos enfermos, incapacitados o familiares muy mayores.

La desproporción se hace también muy notoria al hacer el porcentaje de mujeres y hombres que trabajan a tiempo parcial, y el total de hombres y mujeres que estaban ocupados al finalizar la mitad del presente ejercicio. Según los datos del INE, apenas el 6,82% de los hombres que trabajaban en el segundo trimestre del año lo hacían con una jornada a tiempo parcial, mientras entre las mujeres era el 21,32% de todas las que trabajaban en esa fecha. Son tres veces más, la misma proporción que en la comparación anterior.

Las razones de la contratación parcial

¿Por qué hay tanto empleo a tiempo parcial? La Encuesta de Población Activa nos acerca también a los principales motivos? El 46% de quienes trabajan solo una parte de la jornada laboral asegura que lo hace por “no haber podido encontrar trabajo de jornada completa”. Son 1,354 millones de personas de los 2,942 millones de ocupados a tiempo parcial. 

Otro 13,23% no tiene más remedio que acudir a esta modalidad de empleo por estar a cargo del “cuidado de niños o adultos enfermos, incapacitados o mayores”. Un 13,23% esgrime como argumento “seguir cursos de enseñanza o formación”. El resto de las respuestas se reparte entre “otras obligaciones familiares”, “enfermedad o incapacidad propia”... Un total de 276.100 personas, el 9,38% del total, trabajan en esas condiciones por “no querer trabajo de jornada completa”.

Como hemos señalado anteriormente, el 13,6% de los ocupados españoles tiene una jornada de trabajo a tiempo parcial, pero en los primeros años de la vida laboral  y en la prolongación de la misma los porcentajes se disparan, según los datos del Instituto Nacional de Estadística. El punto máximo se da entre los ocupados de entre 16 y 19 años, cuando se alcanza el 57,4%. De los 184.900 trabajadores que hay en esa franja de edad, 106.200 lo hacen con jornada a tiempo y 78.700, el 42,6%, con jornada a tiempo completo. Hace cinco años, en el segundo trimestre de 2009, el porcentaje era del 52,9%. 

Las razones parecen bastante lógicas. Muchos jóvenes se ven obligados a compatibilizar sus estudios superiores o universitarios con el trabajo para poder costeárselos, y pagar al mismo tiempo los gastos de manutención y alojamiento en una ciudad que no es su residencia habitual. Las cifras de la siguiente banda de edad, la de entre 20 y 24 años, confirma esta hipótesis: un 36,4% de los afiliados a la Seguridad Social trabaja a tiempo parcial, casi tres veces más que la media absoluta. En definitiva, cuatro de cada diez trabajadores con edades comprendidas entre los 16 y los 24 años tiene jornada a tiempo parcial: 511.900 personas de un total de 1,299 millones.

A partir de los 25 años, el porcentaje comienza a reducirse hasta tocar suelo en la franja de entre 55 y 59 años. En esas edades, apenas el 10,3% de todos los trabajadores tiene jornada a tiempo parcial, frente al 89,7% de la jornada completa. Sólo a partir de los 70 años la jornada reducida recupera su papel protagonista con el 49% del empleo total, aunque los valores absolutos son muy bajos: 29.800 personas de un contingente laboral de 60.800 trabajadores.