La actividad militar en Ucrania de Rusia tendrá respuesta por parte de los miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), entre los que se encuentra España. Un movimiento que tendrá claras repercusiones económicas. La entrada de las fuerzas rusas en la zona este de Ucrania desatará una oleada de vetos económicos por parte de la OTAN. Un envite que también se espera que realice Rusia y que puede tener un efecto inminente en las empresas españolas que hacen negocios en este país.
Según un informe de la Oficina de Información Diplomática del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, fechado en abril de 2021, España mantiene 653 millones de dólares (585 millones de euros al cambio actual) como posición inversora en Rusia. Aunque el flujo de inversión española hacia el país, que tiene su último dato en 2018 y 2019, registró valores de 4,2 millones de euros y en 2019 de 17,2 millones, respectivamente.
"Hay que tener en cuenta, no obstante, que las empresas implantadas en Rusia tienden a reinvertir parte de los beneficios más que a traer recursos de España, de forma que estas inversiones no aparecen en las estadísticas, sería el caso de Grupo Fuertes (cárnicos), Coexpan (envases) o Roca (sanitarios)", explica el documento de la Oficina de Información Diplomática del Ministerio de Asuntos Exteriores.
El Grupo Fuertes, el holding que controla la reconocida marca cárnica de El Pozo, tiene una filial en Rusia denominada Tamboskaia Indeika en la que comparte propiedad con Cherkizovo, la mayor empresa cárnica rusa, para construir una empresa productora de carne de pavo. Una empresa que tiene su nombre porque Tamboskaia es la región donde se sitúa (Tambov) y Indeika porque es la palabra rusa para decir “pavo”. La compañía que ocupa una posición de privilegio en el mercado cárnico local y que su facturación ya ronda los 100 millones de euros.
Roca, por su parte, ha encontrado un hueco en el negocio ruso. El fabricante catalán de productos de baño lleva dos décadas en este mercado y demostró su apuesta por Rusia cuando en 2007 compró Keramika, propietaria de la marca de sanitarios que era entonces una de las principales enseñas de retretes del país. Por último, Coexpan, el líder español en empaquetado de alimentos y miembro del grupo empresarial Lantero, acumula 25 años en el país. Esta empresa cuenta con dos fábricas, una en Moscú y otra en San Petersburgo.
Negocio energético en Rusia
El sector energético es uno de los más relevantes para las empresas españolas. El contrato más importante de las relaciones energéticas bilaterales con Rusia lo constituye Naturgy, firmó en 2013 un contrato con el consorcio Yamal LNG, para el suministro de gas natural licuado (GNL) a través de metaneros. Los socios del proyecto son Novatek (50,1%), la francesa Total (20%), la empresa china CNPC (20%) y el Fondo Ruta de la seda (9,9%). La primera entrega fue en junio de 2018, en la planta de regasificación de Mugardos (La Coruña). Se trata de un contrato de unos 700 millones de euros al año. El GNL de Yamal representa el 15% del GNL importado en España (2019).
Repsol decidió en el arranque de 2022 salir de Rusia mediante la venta a la local Gazprom de los últimos activos que le quedaban en el país a través de Evrotek-Yugra y ASB Geo. Además, según recuerda el documento de la Oficina de Información Diplomática del Ministerio de Asuntos Exteriores, la petrolera cuenta tiene 2019 con un acuerdo con la rusa Novatek, con un contrato a largo plazo de compra de gas natural licuado (GNL) que procede del yacimiento de Yamal, en Siberia. El contrato abarcaba el suministro de un millón de toneladas anuales en los próximos 15 años.
En el ámbito de las energías renovables destaca la actividad de Windar, la empresa asturiana de torres de aerogeneración y que prepara un inminente salida a Bolsa, Esta empresa cuenta con una fábrica en Taganrog, región de Rostov del Don, para suministrar a Vestas. Otra empresa energética con actividad en la zona es Elawan Energy, del grupo Gestamp, que participa en las subastas de renovables que el Ministerio de Energía ruso lanza periódicamente. Los operadores de energía 'verde' están pendientes de la aprobación por parte del Gobierno de la segunda fase del programa de energías renovables, que abarcará el periodo 2025-2035.
Triunfo del textil
Otro sector español que triunfa en Rusia es el textil. Y, una vez más, con Inditex a la cabeza. La empresa de Amancio Ortega tiene en el país un total de 345 establecimientos, repartidos en 69 tiendas de Zara, 58 de Pull&Bear, 25 de Massimo Dutti, 60 de Bershka, 61 de Stradivarius, 47 de Oysho, 19 de Zara Home y 6 de Uterqüe. Un país al que también apostó Mayoral, aunque en menor medida.
Los sectores que más inversión española recibieron fueron: agricultura (71,3% del total), fabricación de vehículos de motor (13,2%) fabricación de material eléctrico (12,6%) y reparación e instalación de maquinaria (2%). Por ello, empresas como Cie Automotive, Gestamp o Grupo Antolin apostaron por este país.
Actividad rusa en España
La actividad empresarial rusa en España también ha aumentado en los últimos años. Rusia ocupó en 2018 (último dato disponible) el lugar número 41 en el ranking de inversores en España, bajando diez puestos respecto al año anterior, con un stock de inversiones de 472 millones de euros. Los sectores donde se concentra el stock de inversión rusa hasta 2018 son: servicios de alojamiento (37,74% del total), actividades inmobiliarias (29,29%), construcción de edificios (15,75%), y metalurgia (4,35%).
El flujo de inversión rusa alcanzó en 2018 los 111,3 millones de euros (un 112,4% más que en 2017) y en 2019 aumentó hasta los 245,5 millones de euros (120,7% más que el año anterior). Estos flujos recientes se deben en buena medida a las inversiones llevadas a cabo por el magnate ruso Mihail Fridman se convirtió en el máximo accionista de la cadena de supermercados DIA en 2019.
Otra inversión destacada en España es la empresa rusa Uniconf, que abrió a finales de 2018 su primera fábrica de confitería y chocolates fuera de Rusia en Santa Cruz de Tenerife. Asimismo, otras empresas como Yandex, el mayor operador ruso de ‘carsharing’, tiene planeado expandir sus actividades a Europa y baraja instalarse en Madrid o la cadena de supermercados Mere, que planea expandirse al mercado español a partir de marzo de 2021 en Madrid, Murcia, Comunidad Valenciana, Cataluña y parte de Andalucía. Una actividad empresarial que también estará pendiente de los posibles vetos comerciales.