Cuando toda la agenda legislativa de un Gobierno pasa por los recortes, las ayudas públicas deben ser exageradas hasta el extremo. A esa consigna parece responder el último anuncio que ha hecho La Moncloa: un programa de empleo juvenil tan amplio que afectará nada menos que a 500 jóvenes.
El consejo de ministros sólo ha aprobado las bases reguladoras de ese programa por el momento pero ya ha sido suficiente como para que la vicepresidenta del Gobierno ponga en valor los cinco centenares de jóvenes que podrán beneficiarse de lo que oficialmente se presenta como “Mi primer empleo, EURES” con un toque que recuerda a “mi primera colonia, Chispas”.
"Mi primer empleo, EURES", reza el anuncio de Moncloa
Sin embargo, las cifras del programa quedan empequeñecidas cuando se comparan con las de la competencia que suponen empresas privadas. Sólo este año, las becas del Banco Santander, por ejemplo, alcanzan a 5.000 jóvenes, diez veces más que las del Gobierno de España. Y el año pasado, tras 60.000 solicitudes, 7.500 estudiantes más fueron agraciados con el "Programa CRUE CEPYME Prácticas en Empresa".
Frente a los datos de 2011, cuando 356.600 jóvenes perdieron sus puestos de trabajo, 2012 ofrece 500 becas con el dinero de la Comisión Europea. La pregunta sigue siendo: “¿un pequeño paso para el joven… o propaganda?”.
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