El vicepresidente del Govern, Pere Aragonès (ERC), que se encuentra confinado al estar contagiado por el coronavirus, se ha mostrado partidario de que se cree en Cataluña un frente amplio que permita la reconstrucción del país una vez se supera la pandemia del COVID-19. Aragonès, en una entrevista concedida a El Periódico, ha explicado que la única forma de garantizar que se mantenga la actividad económica cuando se supere este episodio de crisis "es preservar la salud de la población".
Por este motivo, Pere Aragonès ha exigido que se apliquen “medidas extraordinarias” más duras que las vigentes durante el estado de alarma, entre las que ha priorizado restringir el trabajo y los desplazamientos a los sectores esenciales, “aunque suponga un coste para la economía”. El político republicano ha defendido que no hacerlo,o apostar por lo contrario, tendrá “un coste social, humano y económico mucho más alto”.
El vicepresidente ha aplaudido las decisiones tomadas por el Gobierno de España pero ha matizado que son “insuficientes” y que es necesario dar “un paso adelante”. En esa línea, Aragonès ha reclamado que se dote de seguridad jurídica a los ciudadanos que trabajen “en sectores no esenciales” para que se confinen completamente y no vayan a trabajar. Pere Aragonès también ha echado en falta otras medidas de Pedro Sànchez como “el aplazamiento generalizado del pago de impuestos o mayores ayudas a los autónomos”.
Más recursos para el ámbito sanitario
El líder de ERC ha calificado de “útil” el paquete de medidas económicas impulsadas por Sánchez, aunque sugiere que se añadan “más recursos para sanidad. En el ámbito sanitario debe fijarse una partida económica sin límite. Se deben aportar todos los recursos que se precisen”, ha subrayado y ha asegurado que puede hacerse, por ejemplo, aprovechando parte de los 750.000 millones de euros en deuda pública del BCE para financiar la respuesta sanitaria.
Aragonès ha asegurado que su partido y su socio de gobierno (JxCAt) han aparcado sus discrepancias para centrarse en la lucha contra la pandemia con la finalidad de que “todas las áreas del Govern funcionen a pleno rendimiento”. En otro orden de cosas, el vicepresidente de la Generalitat ha exigido el fin de la Monarquía española porque es “una institución caduca y corrupta por naturaleza”.
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