El socialista y ex presidente de la Comunidad de Madrid, Joaquín Leguina, promueve un manifiesto contra el confinamiento ordenado por el estado de alarma por la pandemia del coronavirus. Lo hace junto a otros tres economistas (Juan José R. Calaza, Andrés Fernández Díaz y el también socialista Guillermo de la Dehesa) y con duras advertencias al Gobierno del PSOE y Unidas Podemos por la decisión de confinar en casa a la práctica totalidad de los españoles con la excusa del COVID-19.
"El confinamiento", reza el documento, "es una medida fascista, ineficaz, humillante, traumatizante y destructiva, que supone más problemas que soluciones". En opinión de sus autores, es fruto de "una visión cortoplacista y chapucera", además de una medida "draconiana" que tendrá impactos "devastadores" a todos los niveles.
En opinión de los autores del manifiesto, el confinamiento es "un arresto domiciliario" que se ha adoptado "sin que haya habido juicio ni sentencia". Y creen que se trata de una medida de "dudosa legalidad, adoptada brutal e irracionalmente".
Estigma y hecatombe económica
Entre las consecuencias que tendrá para España esta cuarentena sin límite anunciado, los autores del manifiesto señalan, sobre todo, la "estigmatización de los mayores" por parte de los jóvenes, que los harán responsables de "la hecatombe económica". Y es que los cuatro autores del escrito tienen claro que el Gobierno de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias ha puesto el país al borde del abismo: "Quedará abatido hasta la melancolía enfermiza, noqueado por la falta de perspectivas, hundido en el pesimismo nihilista".
Consideran, además, incoherente que se decrete un confinamiento para proteger a los mayores, que son el colectivo más vulnerable al COVID-19, y, a la vez, no se haya actuado de forma contundente en las residencias o se esté dejando de atender en las UCI a los ancianos. "La discriminación contradice de lleno la finalidad del confinamiento", recuerdan.
El peligro independentista
Temen, por otro lado, que la situación se agrave por la acción de los "anticonstitucionalistas e independentistas", a los que califican como "enemigos de la Nación". Auguran que estos aprovecharán el momento para "inventarse una sarta de nuevos agravios comparativos" que, advierten, "pueden resultar fatales a la democracia y a los españoles de bien". Estos partidos, recuerdan, "proponen medidas de confinamiento extremas, descontando una crisis peor que la de 2008, en aras de abonar el terreno a sus nefastas y no ocultadas pretensiones".
Los autores del manifiesto, finalmente, creen que deben ser los ciudadanos los que se responsabilicen de adoptar medidas de protección. Y exigen al Gobierno de Sánchez que active de una vez por todas las economía porque "España no podrá encajar dos crisis [sanitaria y económica] seguidas". "Ya que no fueron capaces de evitar la primera crisis", concluyen, "evitemos la segunda".
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