La investidura de Pedro Sánchez pone en aprietos a ERC. Los republicanos liderados por Gabriel Rufián en el Congreso buscan una excusa para poder abstenerse y evitar una voladura de puentes con los socialistas catalanes liderados por Miquel Iceta, pero Quim Torra está preparado ante este escenario con la convocatoria de un adelanto electoral.
Esta estrategia ha generado "división" y "preocupación" en el seno de ERC, según fuentes conocedoras de la situación interna de los republicanos. Si Sánchez lograse convocar el pleno del debate de investidura, que aún no está claro debido a la falta de apoyos tanto por la parte independentistas como de Ciudadanos, PP y Vox, Torra tendría tiempo para presionar a ERC con una convocatoria adelantada.
Este supuesto, "obliga a ERC a posicionarse en el mismo sentido que JxCat", han destacado las mismas fuentes consultadas por El Liberal, para "no evidenciar una ruptura de la unidad independentista y evitar así ser señalados como los responsables".
La batalla por el relato
Así las cosas, todo queda a expensas del movimiento de ERC, que deberá afrontar una batalla por el relato de quién ha roto la unidad independentista en caso de facilitar una investidura de Sánchez, si JxCAT mantiene su rotundo no.
Desde ERC, con Rufián al frente, se ha matizado el mensaje favorable a facilitar la investidura e incluso se ha respondido a la llamada de JxCat para dibujar una estrategia conjunta entre los independentistas quitando hierro a las recientes guerras entre ambos, como los pactos tras las municipales o el rechazo de concurrir a las elecciones del 28-A con una lista unitaria. La CUP se pronunciará sobre esta negociación este martes.
Pese a su salida de la primera línea política, Joan Tardá ha salido también a defender moderadamente un Gobierno de Pedro Sánchez. "El Estado español es democrático, pero se trata de una democracia de baja calidad", ha asegurado recientemente en Barcelona. Los críticos de ERC ,por su parte, muestran su reticencia a dar el voto al PSOE, que votó a favor del 155 de la Constitución, salvo contrapartidas que permitan una justificación clara ante el electorado independentista.
La temida recuperación de la CUP
Temen que hasta el 20% de su electorado pueda moverse por una decisión desacertada, dejando a ERC sin dar el ansiado sorpasso para ser la primera fuerza en Cataluña en unas autonómicas, tras ganar a JxCat en las pasadas elecciones.
Otro de los motivos por los que Torra podría adelantar los comicios en Cataluña sería su posible inhabilitación. Las fuentes consultadas descartan un candidato de consenso entre JxCat y ERC para aguantar un año si el presidente de la Generalitat fuera condenado por el TSJC y presentara después un recurso ante el Supremo. En este caso, la condena en firme, si llegara, podría ser para finales del próximo año, a 12 meses de la convocatoria obligatoria de las elecciones. "Faltaría conocer el voto de la CUP y es probable que suba por encima de los cuatro diputados que tienen actualmente", han señalado las mismas fuentes. "Un sustituto de un año no es factible", han señalado. "La CUP viene con inercia y con una gran movilización entre los suyos, que son los que son, pero restan votos a los dos grandes partidos", han señalado.
También queda por descifrar si los Presupuestos de la Generalitat se convalidarán antes de la investidura de Sánchez. ERC ha utilizado hasta ahora esta baza para presionar a Torra y aún no tiene los apoyos suficientes para sacarlos adelante.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación