Los miembros de los Comités de Defensa de la República (CDR) detenidos esta semana mantuvieron un encuentro "secreto" el pasado 15 de septiembre de 2018 con la hermana del expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, para "entregar documentación sensible" y establecer "comunicaciones seguras" entre el exjefe del Ejecutivo catalán y su sustituto en el cargo, Quim Torra. Así se desprende de un auto del juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón al que ha tenido acceso la Cadena Ser.
Según el documento revelado, habrían adoptado "unas grandes medidas de seguridad" para celebrar la reunión, donde estuvieron presentes cinco de los siete detenidos por posesión de artefactos explosivos. Uno de ellos llegó a asegurar que Torra también se encontraba en esa reunión aunque los investigadores no dan credibilidad a ese testimonio.
En el auto, el magistrado también dice que "no se descarta" que los detenidos tuviesen intención de enviar bombas caseras por correo a distintos cuarteles de la Guardia Civil además de estar planificado "ocupar durante cinco días el Parlament" de Cataluña.
Por otro lado, señalan como cabecilla del grupo al detenido Ferrán Solis, quien trasladó a uno de sus compañeros en una conversación telefónica que se estaba "jugando el culo", ya que si le "pillaban", entraría en prisión por "terrorismo y banda organizada".