Economía reclama “independencia de actuación”, la oposición denuncia un “interés partidista” pero el resultado práctico del pulso entre PSOE y PP es que se está abordando el problema europeo (el de la deuda soberana) mientras se obvia el problema español (el de los activos inmobiliarios). Se deja sin solución el cómo sanear el parque inmobiliario que los bancos españoles acumulan ahora.
Según reconocen fuentes de la negociación española, “se ha roto la unidad de acción en defensa de los intereses españoles”. Fuentes populares denuncian que “la negociación que el Ejecutivo está realizando en Bruselas se ha hecho a espaldas del Partido Popular”. Por ese motivo, añaden, Elena Salgado “traslada el problema al próximo gobierno y estigmatizará a quien, en el futuro, plantee problemas particulares”.
80.000 millones de ida, 23.000 de vuelta
El compromiso final pasa por que el gobierno español aporte garantías por 80.000 millones de euros para dotar el nuevo fondo de rescate del que España obtendría un máximo de 24.000 para su sistema financiero. A cambio, el gobierno español acepta aumentar la capitalización de la banca española al 9% y considerar como líquido los bonos convertibles.
El problema de los activos inmobiliarios contaminados puede elevarse a los 300.000 millones de euros. Por ese motivo, el PP pide al Ejecutivo que encauce ya una solución, “sin esperar a que lo solucione un futuro gobierno de Rajoy”.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación