El estudio, titulado 'El mercado de trabajo en los trimestres centrales de 2011 y la crisis financiera y el paro estructural: una perspectiva de largo plazo', refleja los cambios registrados en el mercado laboral en el semestre comprendido entre abril y septiembre de 2011.
Oliver, que es catedrático de Economía Aplicada de la Universitat Autónoma de Barcelona y autor del estudio, ha explicado que desde julio "ha cambiado la percepción de las posibilidades de una nueva y profunda recesión, lo que ha provocado una crisis de confianza sobre el euro que ha generado un empeoramiento de las cifras del paro".
El catedrático ha estimado que será a finales de esta década cuando se pueda restablecer el porcentaje de paro de larga duración anterior a la crisis porque "solo para recuperar los puestos de trabajo destruidos ya se invertirán siete años".
Aún así, ha reconocido que todavía no se ha llegado a "la fase de crear empleo", ya que durante 2012 se estima incrementará el porcentaje de paro en el sector de la construcción, cuyos puestos de trabajo suponen actualmente el 7,5% del total de la mano de obra de España, solo una décima por encima del mínimo histórico de 7,4% registrado en el segundo trimestre de 1985.
LARGUÍSIMA DURACIÓN
El estudio refleja que los 3,1 millones de nuevos parados en la crisis se distribuyen en tercios: menos de un año (1,2 millones), entre uno y dos años (cerca de 1 millón) y más de dos años buscando empleo (un millón), lo que significa que más de la mitad del paro es de larga duración.
"Del total de paro, el 25% son de larguísima duración, ya que llevan dos o más buscando empleo", ha comentado el profesor Oliver, quien ha recordado que este colectivo había reducido su peso hasta un 10% a finales de 2009.
Oliver ha declarado que "el paro de larga duración se ha convertido en una característica crónica de nuestra economía que sólo se superará generando confianza interna y externa, mejorando la productividad y fomentando la movilidad laboral".