El presidente del Grupo Parlamentario Socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, centrará su intervención en el debate de investidura de Mariano Rajoy en intentar que éste concrete sus planes de gobierno y deje atrás las ambigüedades y en dejar claro que PSOE y PP no son lo mismo, tampoco en la oposición, según han informado a Europa Press fuentes de su entorno.
El PSOE cuenta con que en el debate de este lunes Rajoy concretará bastante su proyecto para España pero teme que deje sin precisar asuntos importantes con "excusas" como que aún tiene que conocer la situación real de las cuentas públicas. Rubalcaba le advertirá en tal caso de que ese pretexto "no se sostiene" porque el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero ha hecho un traspaso de poderes "exquisito" y ha facilitado al PP todos los datos que ha pedido.
Además, los socialistas temen que Rajoy anuncie medidas demagógicas, --promesas de reducción de altos cargos, coches oficiales o gastos de representación--, que apenas tienen impacto real en la economía, pero que pueden servir de golpe de efecto para justificar o desviar la atención sobre medidas más duras, o incluso recortes sociales de calado como ha sucedido en las comunidades autónomas donde gobierna el PP.
También en línea con lo que han hecho los 'populares' en algunas comunidades, el PSOE teme que Rajoy pueda aprovechar la excusa del ahorro para eliminar organismos oficiales que controlan o condicionan la acción del Gobierno. Por todo ello, Rubalcaba advertirá a Rajoy de que le ha llegado "la hora de la verdad" y no puede seguir ocultando sus planes para España.
En segundo lugar, dejará claro que los socialistas harán una oposición distinta a la que ha hecho el PP y no se dedicarán a ir "sembrando dudas por Europa y por el resto del mundo, sobre la solvencia económica y la capacidad de salir de la crisis", según las fuentes consultadas.
QUIERE ESCUCHAR, NO COMO RAJOY
De entrada, Rubalcaba no terminará de escribir su discurso hasta escuchar el de Rajoy -el presidente del PP intervendrá a las 12.00 horas y el de la oposición lo hará a las 16.00_porque quiere escuchar "de verdad" lo que tenga que decir el próximo presidente del Gobierno. En el PSOE subrayan que ahí ya se notará una diferencia, puesto que Rajoy llevaba escritos de antemano sus discursos parlamentarios y no los modificaba dijese lo que dijese Zapatero.
El representante socialista sí tiene ya preparada una parte de su discurso, incluida la relativa al papel que debe desempeñar la UE en la solución de la crisis, un capítulo en el que defenderá la emisión de eurobonos --o algún tipo de mutualización de la deuda soberana europea - y la necesidad de que el ajuste económico sea más escalonado y de que la UE haga políticas de estímulo, según han explicado a Europa Press colaboradores de Rubalcaba.
También tiene a punto ya la parte en la que explicará cómo será la actuación del PSOE en la oposición: por un lado, "constructiva y leal", una oposición "útil" que ayude y no que dificulte la lucha contra la crisis y, por otro, "rigurosa y firme" en la defensa del Estado del bienestar y de las libertades.
El PSOE tiene claro que la prioridad en el debate y durante toda la legislatura va a ser la lucha contra el paro y contra la crisis económica, así que su intención es ser aliado del Gobierno contra la crisis pero plantarle cara si usa la crisis como excusa para desmantelar el Estado del bienestar y en especial, la sanidad, la educación y los servicios sociales.
Así las cosas, está por ver hasta qué punto Rubalcaba aprovecha el debate para presentar el modelo económico alternativo del PSOE. El líder de la oposición es consciente de que el foco estará puesto en los anuncios que haga Rajoy, pero algunos de sus colaboradores creen que el PSOE debe dejar claro desde el primer día que, frente a las políticas de Rajoy, hay un modelo socialdemócrata alternativo.
Es más, en el seno del PSOE hay quien reclama una tarea de oposición y contraposición de modelos constante, avisando de que a pesar de la crisis el partido no puede "confundir pactos de Estado con pactar políticas de derechas".
TRAS LA INVESTIDURA, LA SUCESIÓN
Rubalcaba ha estado centrado en los últimos días en preparar este debate y, según su entorno, hasta que no pase la investidura no tomará una decisión sobre si aspirará o no a ser secretario general del PSOE.
De hecho, el debate sucesorio en el PSOE está en sordina hasta que tome posesión el nuevo Gobierno, dado que también la segunda aspirante más probable, Carme Chacón, ha hecho saber a través de su entorno que no anunciará ninguna decisión mientras siga siendo ministra de Defensa.
Muchos socialistas creen que este lunes marcará inevitablemente un hito en el proceso, porque la actuación de Rubalcaba se interpretará internamente en clave de si sale o no reforzado como posible candidato a liderar el PSOE. Sus detractores creen incluso que es imposible que salga con más fuerza de un debate cuyo protagonista no será él, sino Rajoy.
SEPARA EL DEBATE DE LOS ASUNTOS ORGÁNICOS
En cambio, Rubalcaba ha dejado claro que el debate de investidura no tiene nada que ver con los asuntos orgánicos de su partido y ha rechazado que la situación interna del PSOE pueda debilitar o condicionar su tarea cómo líder de la oposición.
A preguntas de los periodistas el pasado jueves en Zarzuela, incluso rechazó el calificativo de "interino" a pesar de que su liderazgo del Grupo Parlamentario Socialista es provisional, hasta el 38 Congreso Federal en el que el PSOE elegirá a su nueva dirección --del 3 al 5 de febrero en Sevilla--.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación