Uno de los grandes damnificados tras la formación de Gobierno y la constitución del Grupo parlamentario fue, sin duda, Esteban González Pons. El valenciano quedó fuera del Ejecutivo así como de la portavocía en la Cámara Baja donde muchos le daban por seguro, pero no todas las puertas están cerradas para él. A González Pons le aguarda un “puesto destacado” en la dirección del partido tras el congreso nacional de los días 17, 18 y 19 de febrero, según ha podido saber Vozpópuli de fuentes populares.
A diferencia de Federico Trillo, que, como informó este medio, sopesa abandonar el Parlamento, el vicesecretario popular de Comunicación se mantiene tranquilo a la espera del cónclave de Sevilla. Eso sí, sus responsabilidades estarían aún por determinar en un partido donde no está previsto que cambie en lo sustancial el actual organigrama, que parece repetirse casi mimético en la ponencia de Estatutos que maneja ya la comisión organizadora del congreso.
Y es que parece más que probable que María Dolores de Cospedal repita como secretaria general del PP, tal y como adelantó este medio. Dada su condición de presidenta de la Junta de Castilla-La Mancha, el día a día de la administración del partido recaería en un coordinador general, siguiendo el modelo que se instauró en 1996 cuando, con el PP en el poder, Francisco Álvarez-Cascos prosiguió de “número dos” y Ángel Acebes fue nombrado coordinador general, figura que no existía. Ese podría ser, aparentemente, el mejor encaje para González Pons, aunque los medios consultados por Vozpópuli, descartan esa opción.
Un hombre de la casa: Juan Carlos Vera
Cospedal, alegan “estará más presente en Génova de lo que en su día estuvo Cascos, por lo que la persona destinada a llevar el día a día tendrá un perfil político más bajo del que disfrutó Acebes”. De hecho, distintos dirigentes del partido apuntan para ese cargo sin dudarlo al actual coordinador de Organización, Juan Carlos Vera, un profundo conocedor del partido, hombre de la casa, de lealtad contrastada y muy valorado por Mariano Rajoy.
Distintas fuentes consultadas también señalan que un tándem formado por Cospedal y González Pons podría colisionar. De hecho, el valenciano estuvo llamado en 2008 para ser el portavoz del partido, tarea que no dejó de ejercer la ahora presidenta de Castilla-La Mancha. El protagonismo del vicesecretario de Comunicación se ha concentrado en etapas electorales y previas a la formación de Gobierno y no tanto en la gestión diaria del partido durante cuatro años.
González Pons ha recibido una llamada de Mariano Rajoy, consciente de la debilidad en la que ha quedado el valenciano.No obstante, se ignora si en esa conversación fue Rajoy el que tranquilizó al cabeza de lista por Valencia o lo ha hecho por persona interpuesta, pero, en todo caso, el mensaje ha llegado a su destinatario.
Matas pone el ventilador
Además, en Génova niegan que el futuro del valenciano pueda verse enturbiado por las palabras del ex presidente balear Jaume Matas. Matas dijo no entender por qué González Pons no está imputado en el caso que afecta al yerno del Rey, Iñaki Urdangarín, dado que el Gobierno valenciano firmó un contrato con Noos para la organización de unos Juegos Europeos que jamás se celebraron. Desde la dirección del partido recuerdan que Matas quiere forzar la salida del "caso palma Arena" de Baleares para que vaya a la Audiencia Nacional y recuerdan que González Pons acudirá a declarar como miembro entonces del Consell valenciano sólo en calidad de testigo.
Queda por dilucidar cuál puede ser ese “puesto destacado” si el organigrama actual del PP apenas cambiará tras la cita congresual. De hecho, en el texto actual de Estatutos no aparece si quiera la nueva figura del coordinador general, salvo que se incluya vía enmiendas. En todo caso, el comité ejecutivo es soberano para determinar, en función de los intereses del partido, la creación de un cargo que no esté recogido en los estatutos. De hecho, el comité de dirección que se reunía los lunes por la mañana, tampoco está en el organigrama.
