Bankia, Sabadell, Popular y Bankinter son, con mucha diferencia, los cuatro bancos de toda Europa que más van a ganar arbitrando con la subasta de liquidez del Banco Central Europeo (BCE) y la deuda a corto plazo. Mediante este carry trade, las entidades toman dinero al 1% a 36 meses a través del LTRO (Long Term Refinancing Operation) y lo colocan en deuda a corto plazo (con vencimientos como máximo a tres años) a un tipo más alto, aplicándose a su favor ese diferencial. La operación es muy rentable a corto plazo, pero peligrosa a medio, destacan en Barclays.
Conforme un informe de este banco británico, titulado “Por qué estamos preocupados por el LTRO”, señala que este arbitraje será especialmente beneficioso sobre todo para los bancos españoles con efectos inmediatos. De acuerdo a sus estimaciones, Bankinter es la entidad europea que más impacto favorable ha tenido en sus ganancias el pasado año, con casi un 30%, mientras para 2012 Bankia, Sabadell y Popular se beneficiarán de más de un 50% en sus resultados, siendo estas tres entidades las más favorecidas con muchísima diferencia.
Le seguirían a continuación Bankinter, con casi un 35% y a partir de ahí, los italianos UBI, Monte dei Paschi Siena y Unicredito, aunque todos por debajo del 20%. Por debajo de estos, ya no aparece ninguna entidad cuyos beneficios se vayan a ver impactados favorablemente en más de un 10% por este carry trade.
Preocupante
Barclays pone de manifiesto que aunque esto es una gran ventaja a corto plazo para estas entidades, es una circunstancia de corto recorrido, que genera una gran dependencia sobre el banco central y no abre en absoluto las puertas de los mercados privados de financiación.
Asimismo, la firma británica, alerta de que no es sostenible el rally de las últimas semanas, ya que las subastas se están adjudicando cada vez con tipos más bajos. Por otro lado, destaca que las entidades financieras están incrementando el riesgo soberano en cartera de nuevo, lo que eleva los riesgos, entre otros, de sus accionistas.
El pasado mes de diciembre, el BCE colocó 489.000 millones de euros en esta subasta. Barclays calcula que cada 100.000 millones generan unos 5.000 millones de beneficios a las entidades tomadoras. El banco británico estima que la repercusión en las ganancias de las firmas europeas ronda los 9.500 millones de euros y que, a corto plazo, “se puede ver ya que el mayor impacto será en los bancos italianos y españoles”.
Ante este panorama, en Barclays no creen que la próxima subasta de este mes del BCE vaya a tener unas cifras tan descomunales, ya que los problemas de liquidez han desaparecido para las entidades financieras europeas. Conforme sus cálculos, la colocación será de 250-350.000 millones, de los que casi la mitad serán dedicados a renovar deuda que vence, adquirida con dinero de la anterior subasta.