España

Fomento ‘out’: Economía y el ‘lobby’ ferroviario preparan la privatización de Renfe

El ministerio de Luis De Guindos se impone al de Ana Pastor, imprimiendo a la operadora un ritmo más liberal por la necesidad de hacer caja. La CEOE, muy presente en la redacción del decreto-ley que prepara el Gobierno sobre la liberalización del transporte de viajeros. 

  • El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, junto a la ministra de Fomento, Ana Pastor, llegan al Senado la semana pasada.

Desregular, liberalizar, privatizar. Términos parecidos, pero ni por asomo iguales. Y parece que es el tercero –privatizar- el que se está imponiendo en el borrador que prepara el Gobierno sobre la liberalización del sector del transporte de viajeros, que pivotará esencialmente sobre Renfe Operadora. Es la tesis del Ministerio de Economía la que triunfa y no la de Fomento, según fuentes de Renfe. Ante la necesidad de hacer caja, es el impulso privatizador imprimido por el departamento que dirige Luis De Guindos el que se impone, no la –vista así por un amplio sector cercano a Rajoy- modesta liberalización gradual pretendida por Ana Pastor, la responsable de Fomento.

Aún se desconoce el alcance del decreto-ley que muy probablemente verá la luz un viernes de estos previo al estío. Pero sí algunas pinceladas. Por ejemplo, que el director de la Oficina Económica de Moncloa, Álvaro Nadal, juega un papel preponderante en el bosquejo del plan. Y algo más: la CEOE también está muy presente en la redacción, en representación del lobby ferroviario.

La vía británica, no la germana

El protagonismo de la patronal es, cuando menos, novedoso, como recalcan algunos blogs que, tímidamente, se han hecho eco de la noticia. La CEOE viene a representar a grupos de presión tradicionalmente vinculados al tren, caso de los lobbys de infraestructuras viarias (Ferrovial, ACS…) y de trenes (CAV, Bombardier, Siemens…).

La victoria de Guindos es también una victoria de la vía británica: los trenes de Cercanías ingleses funcionan mediante franquicias, que se conceden al mejor postor, mientras que la alta velocidad es completamente privada. Pastor apostaba más bien por una salida alemana, basada en la colaboración público-privada, pero dando siempre primacía a la operadora, en este caso Deutsche Bahn.

Otras fuentes hablan de la participación del Ministerio de Hacienda, ya que se contempla la opción de que Renfe pase a manos de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), dependiente del ministerio que dirige Cristóbal Montoro. Pero esta versión no ha podido ser confirmada. Lo que está claro es que Pastor y Guindos difieren en el enfoque y en los plazos. Y que el desencuentro se saldará con la victoria del ministro. Otra vez. 

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación Vozpópuli