El exministro de Transportes y ex número tres del PSOE José Luis Ábalos ha pedido su personación en el Juzgado de Instrucción número 33 de Madrid, adonde ha sido repartida la denuncia de la Fiscalía por un posible delito de revelación de secretos en el marco del 'caso Koldo', que se instruye en la Audiencia Nacional.
En esta nueva solicitud, el hoy exministro pide la identificación e imputación de los guardias civiles de la UCO encargados en tareas de Policía Judicial de reunir los indicios en torno al también llamado caso Delorme sobre los contratos del Ministerio de Transportes con Soluciones de Gestión para la adquisición y suministro de material sanitario durante el periodo de pandemia.
La Fiscalía Provincial de Madrid presentó en agosto denuncia para su reparto en los juzgados de instrucción de la capital de España derivada de la que a su vez presentó ante el Ministerio Público el propio Ábalos por un presunto delito de revelación de secretos.
Marlaska, en el punto de mira
De acuerdo con las dos comunicaciones enviadas por la Fiscalía a Ábalos, el órgano central del Ministerio Público procedió, a finales de julio, a repartir la denuncia a la Fiscalía Provincial de Madrid, al ser esta considerada la competente para valorar la procedencia de la denuncia de Ábalos por las filtraciones producidas a raíz de la eclosión del caso Koldo sobre aspectos de la vida personal del exministro y de su entorno familiar, de las que el también exdirigente socialista responsabiliza directamente al Ministerio del Interior que dirige Fernando Grande-Marlaska.
Con anterioridad, en concreto el 29 de julio pasado, la Fiscalía informaba a Ábalos, por medio de otra notificación, de la remisión de su denuncia a la Fiscalía Provincial de Madrid.
El pasado 24 de julio, José Luis Ábalos presento una denuncia ante la Fiscalía por revelación de secretos y de comunicaciones con "el ruego de que se investigue a los responsables de tales acciones" que el hoy diputado en el grupo mixto considera un proceso de "espionaje" sobre su persona, desarrollado por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y, por tanto, instigado en última instancia por el Ministerio del Interior que dirige su antiguo compañero de gabinete Fernando Grande-Marlaska.
