El Sindicato de Abogados Venia ha convocado para el próximo 21 de noviembre una huelga a nivel nacional para que todos los abogados y abogados de oficio se unan a un parón indefinido. El grupo sindical pide al Gobierno mejorar de manera urgente las condiciones de prestación del servicio de guardias y turno de oficio.
Entre sus reivindicaciones están la regulación jurídica del profesional del turno de oficio, una subida salarial, la cotización a la Seguridad Social con efectos retroactivos y el derecho a la conciliación, descanso y desconexión digital, entre otras. La abogada Bella Sánchez, responsable del Departamento de Comunicación del sindicato, desvela a Vozpópuli las malas condiciones que soporta el sector y lo que se pretende conseguir con esta huelga.
Entre los principales problemas a los que se enfrentan día a día los abogados de oficio se encuentra la falta de una regulación jurídica que acote las particularidades del turno de oficio. Ejemplo de ello son aquellos casos en los que los profesionales deben "trabajar gratis". Según explica la abogada, hay procedimientos que no son retribuidos económicamente a los letrados, como puede ser en el caso de que un representado se encuentre en prisión provisional y haya que presentar un recurso. En ese caso, esas comparecencias no se pagan al ser considerados un mero trámite administrativo.
Igualar salarios
Además, las competencias referentes a la Administración de Justicia recaen sobre las comunidades autónomas, por lo que en cada territorio se aplican baremos diferentes. Entre las reclamaciones del sindicato está "unificar criterios para que no se cobre más en un sitio que otro".
"Si nos ponemos a observar lo sueldos de Galicia o del País Vasco y los comparamos con los de Andalucía, la diferencia es bastante elevada", denunia Sánchez. Por ello, desde el Sindicato de Abogados Venia exigen al Ministerio de Justicia que se cree un estatuto jurídico con las obligaciones y los derechos del abogado de turno de oficio.
La representante sindical detalla, también, la necesidad imperiosa de que se reconozca la relación laboral cuando los letrados están en funciones de guardia, ya que entiende que la labor que desempeñan es un trabajo para la Administración de Justicia. "Nosotros lo que hacemos es prestar una asistencia jurídica obligatoria, que se impone por ley a la Administración de Justicia, y que realmente es ahora cuando lo estamos ofertando nosotros. Si al justiciable no se le reconoce la justicia gratuita, el abogado no va a cobrar ni de la Administración, y muchísimo menos del justiciable", denuncia.
Conciliación y derecho a la desconexión
El sector de oficio sufre jornadas maratonianas que complican que los trabajadores puedan conciliar su trabajo con su vida personal. Según argumenta Bella Sánchez, al no existir una regulación jurídica no pueden disfrutar de unas vacaciones al uso, como el resto de empleados de Justicia: "Es verdad que los juzgados cierran en agosto, pero hay determinadas materias como causas en instrucción o procesos laborales que no son inhábiles en el mes de agosto. Con lo cual, te tienes que ir con el ordenador y no desconectas".
La abogada narra a este medio una de las 'injusticias' a la que se tuvo que enfrentar cuando dio a luz a su hijo. Cuenta, enfadada, que cuando estaba ingresada en el hospital, ante la imposibilidad de aplazar una vista programada en referencia a uno de sus defendidos, se procedió a designar otro abogado de oficio a su representado.
Si alguien está de baja, debe recurrir a otro compañero para que se presente a la vista o el caso pasará a estar en manos de otro letrado. "Queremos se dignifique la profesión de abogado, que no se nos trate como si fuéramos abogados de segunda", sentencia.
Bella Sánchez defiende que la "realización de campañas de sensibilización" para que pueda ver la sacrificada labor del turno de oficio y conozca que la formación de estos profesionales es más amplia que la de otros abogados, ya que al cubrir diferentes casos deben tener estudios sobre varias áreas del derecho.
"Sueldo digno" para los abogados de oficio
Por todo ello, el sindicato exige que se les pague un sueldo digno los abogados y procuradores de oficio, correspondiente al trabajo ejecutado. "Que sea la propia Administración, ya que es ella la que obliga a prestar el servicio a las personas sin recursos o que no tienen abogado designado, la que se encargue de cobrarles a estos ciudadanos lo que les haya podido costar a la Administración el coste del abogado de oficio. De esta forma, nosotros cobraríamos por un trabajo realmente efectuado", precisa.
Por el contrario, "estamos en condiciones de semiesclavitud, obligados a llevar los casos". Tal y como denuncia la representante sindical, los abogados de oficio no pueden renunciar a defender a un justiciable aunque se le deniegue la justicia gratuita y les obligan a trabajar de forma gratuita para la Administración. "En muchos sitios es voluntario ejercerlo, pero en otros, como no hay voluntarios, es obligatorio para todos los colegiados", añade.
El silencio del Ministerio de Pilar Llop
Ante el silencio del Ministerio, los abogados de oficio se han organizado para convocar un parón general. A la espera de la confirmación de las asambleas convocadas en cada comunidad autónoma el Sindicato de Abogados Venia espera una alta participación, ya que las condiciones de los trabajadores de Justicia, desde jueces y fiscales hasta abogados y procuradores del turno de oficio, "tienen que soportar una carga administrativa" que complica la libre labor de sus funciones.
"Consideramos que tendríamos que unirnos todos los operadores jurídicos y elegir un cambio radical. Porque es que no solamente es el tema de los abogados y los procuradores, también los funcionarios, los secretarios judiciales y los jueces tienen sus reivindicaciones", critica Sánchez.
El problema, denuncia, es la falta recursos: "Y es que la Administración de Justicia no da votos. Y un Estado de derecho, un Estado social y democrático de derecho, si la justicia no funciona, no se puede garantizar de ninguna de las maneras".
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