Las mafias de embalaje de maletas en el aeropuerto de Barajas está ‘in crescendo’. Desde que se publicasen las primeras informaciones sobre este fenómeno hace cuatro años, el número de personas que desarrollen esta labor ilegal ha aumentado.
El modus operandi es sencillo. A la vista de todo el mundo y utilizando los carritos del aeropuerto, sacan unos grandes rollos de papel de film con el que envuelven las maletas de los viajeros. Por unos pocos de euros menos (cinco ‘en negro’ frente a los diez ‘oficiales’), sin pagar impuestos ni seguridad social, hacen lo mismo que la empresa concesionaria que sí tienen permitido embalar equipajes.
Si uno se pasea por las salas que preceden al 'checking' de seguridad, puede identificar fácilmente qué maletas están envueltas de manera ilegal. De color verde o blanco y sin sello identificativo, los equipajes embalados en el 'mercado negro' pueden tener problemas a la hora de ser facturados.
Sinapsis Trading, que no ha querido participar en este reportaje, es la empresa que opera en Barajas. En 2015 reemplazó a una UTE que se vio incapacitada para poder trabajar por las ‘mafias del plástico’. Según han publicado distintos medios, las pérdidas por esta actividad ascienden a 12 millones de euros. Trabajadores de la empresa con los que ha podido hablar este periódico prefieren no hacer declaraciones públicas por orden expresa de sus jefes, aunque reconocen que las broncas y las peleas con los ilegales son frecuentes. Algunos han llegado a ser amenazados, según informó Europa Press.
El grado de intimidación ha llegado, en ocasiones, a que algunos hayan acabado su jornada de trabajo con ruedas de los coches y motocicletas rajadas, además de la amenazas de muerte que han sufrido ellos y algunos guardias de seguridad que les han hecho frente.
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