El ex tesorero popular Álvaro Lapuerta, imputado por el juez Ruz, sigue formando parte del máximo órgano del PP entre congresos, la Junta Directiva Nacional, a la que pertenece desde hace 2008 y para la que fue reelegido en el último congreso popular, celebrado en marzo del año pasado. Lapuerta, antecesor de Luis Bárcenas en el cargo y con quien había mantenido cierta sintonía que comienza a resquebrajarse, está siendo señalado por éste como el poseedor de los originales de los papeles con la supuesta contabilidad B del PP que publicó el diario El País.
El juez Pablo Ruz, que sigue en la Audiencia Nacional la instrucción del caso Gürtel y, en pieza separada la de los papeles de Bárcenas sobre supuesta contabilidad B del PP, imputó a Lapuerta en marzo y le llamó a declarar el día 22 del mismo mes, ante quien negó que hubiera habido cualquier tipo de pagos a dirigentes del PP en negro a través de sobresueldos así como donaciones ilegales al partido. La misma versión mantuvo el 7 de marzo ante la Fiscalía Anticorrupción, donde también tuvo que declarar.
Desde su imputación, el PP ha celebrado una reunión de la Junta Directiva Nacional, celebrada el pasado día 3, a la que Lapuerta no acudió, cosa en todo caso poco excepcional ya que, según señalaron fuentes populares a Vozpópuli, “no suele presentarse porque ya tiene una edad considerable”. Pero acuda o no a estas convocatorias, lo cierto es que no se le ha apartado del máximo órgano del partido entre congresos, a pesar de que, de una manera u otra, todos aquellos que se han visto imputados por presuntos vínculos con la trama corrupta de Francisco Correa han terminado fuera de Génova. Es el caso de Bárcenas, que ha presentado una demanda por despido improcedente, o del ex alcalde de Pozuelo Jesús Sepúlveda, que se incorporó a su puesto de trabajo tras dimitir como regidor pozuelero y con el que el PP pactó recientemente su despido.
Cabe reseñar además que Lapuerta, de 85 años de edad, es miembro electo de la Junta Directiva. Formó parte de la lista de treinta nombres que se votó en el XVI congreso popular de Sevilla, lista en la que entró de la mano de Mariano Rajoy a pesar de haber dejado la tesorería del partido cuatro años antes, en 2008. Dado que en calidad de responsable de las cuentas se es miembro nato del comité ejecutivo nacional, el PP lo rescató ya entonces para la Junta Directiva, de modo que no se desvinculara del partido.
Lapuerta ha desmentido ser depositario de los papeles de Bárcenas "ni conoce los mismos ni ha tenido relación alguna con ellos", según señaló en un comunicado
Además de estar imputado, la posición de Lapuerta comienza a complicarse por momentos, dado que la actual estrategia de su sucesor en el cargo, Luis Bárcenas, pasa por señalarle como el poseedor de los papeles originales con la supuesta contabilidad B del partido. Eso indicó, por ejemplo, el columnista Raúl del Pozo el pasado 5 de abril en su artículo “Bárcenas no quiere ser Torres o sí”, acusación respondida por Lapuerta con una amenaza de acciones penales y civiles si no se rectificaba. En una nota de prensa, el tesorero del PP entre los años 1990 y 2008 aseguraba no ser “depositario de los originales de los papeles de Bárcenas, ni conoce los mismos, ni ha tenido relación alguna con ellos”.
Lo más llamativo de la nueva estrategia de defensa de Bárcenas es que comienza a abrirse una brecha entre antecesor y sucesor, habida cuenta de que la tesorería y la gerencia del PP han funcionado durante años casi como una dinastía en que unos y otros elegían “heredero”. La entrada a la tesorería en 2009 del que es actual presidente del Consejo de Estado, el ex ministro José Manuel Romay Becaría y, más tarde, de Carmen Navarro en sustitución de éste, terminó de romper esa práctica.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación