De malas previsiones a peores confirmaciones. La Empresa Municipal de Transportes (EMT) de Madrid va cuesta abajo y sin frenos. Las temidas cuentas anuales correspondientes a 2013 han arrojado datos aún peores de lo que ya se preveía. Los 21,5 millones de euros de pérdidas suponen 150 veces el déficit con el que acabó 2012, de apenas 140.000 euros. Datos en mano, lo que antes era un buque sólido y estable, ahora parece navegar a la deriva. El balance a 31 de diciembre de 2013 es el resumen económico de una empresa que no ha resultado rentable el pasado año, tendencia que de continuar, complicaría la continuidad de la sociedad municipal al entrar en funcionamiento en 2015 la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local, que no permitirá mantener empresas con pérdidas. Para la dirección de la empresa todo está controlado y ya se han tomado las medidas necesarias para afrontar la situación; para la oposición, el balance negativo de la empresa es "intencionado" y considera "intolerable" la pasividad del Ayuntamiento de Ana Botella ante las consecuencias de su pésima gestión.
Esos 21,5 millones de pérdidas netas, fruto de la suma del resultado de explotación y el resultado financiero menos impuestos, resulta una cantidad desorbitada en comparación con las moderadas pérdidas registradas en años anteriores, en los que la empresa pública era solvente en términos económicos. Los ingresos de la explotación se situaron en 496,2 millones de euros, lo que supone un descenso anual del 2,7%, sin embargo, los gastos llegaron a los 513,5 millones de euros, que representa un aumento del 1,7%. Así, el resultado de explotación es deficitario: - 17,2 millones de euros. De otro lado, el resultado financiero (ingresos financieros menos gastos financieros) arroja también 4,2 millones de pérdidas. En definitiva, hay más gastos y menos ingresos, principalmente por el dinero que se esperaba y nunca llegó procedente de la venta frustrada de los terrenos de las antiguas cocheras y el 'pufo' de 7,8 millones que dejó Publi Sistemas, empresa que gestionaba la publicidad.
El descalabro de 2013 no solo supera las previsiones, sino que está a años luz de las moderadas pérdidas de ejercicios anteriores
El Gobierno local no se muestra muy alarmado. Tampoco la dirección de la EMT. Preguntada por posibles ideas para mitigar el peligro que representan los números, la empresa alude al Plan de Futuro presentado el pasado 27 de diciembre por la alcaldesa. Dicho plan, que contempla entre otras medidas la fusión con Madrid Movilidad, "se creó expresamente para hacer frente a esta situación y en él están resumidas todas las líneas de actuación". Considera que nada ha cambiado desde ese día, que la situación económica es la misma que ya se conocía, y por tanto no hay nada que añadir. El Ayuntamiento cree que ya ha hecho lo que tenía que hacer adoptando todas las medidas necesarias y fía a ese programa la viabilidad de la EMT. "¿Qué más se puede pedir?", responden desde el PP madrileño.
La percepción es bien distinta entre los trabajadores. UGT-EMT considera que el Ayuntamiento, como responsable subsidiario, lejos de apoyar a la empresa la ha dejado a su suerte y apunta directamente a "errores de gestión tanto del consistorio como de la dirección" y a decisiones políticas como causantes del ruinoso estado de la sociedad municipal. La situación es inaudita. "La empresa nunca había pasado por una situación así", explica a Vozpópuli Juan José Castañeda, secretario general del sindicato.
El mayor ingreso que ayudaba a compensar las pérdidas procedía de la tarifa de equilibrio, subvención que recibe por cada viajero transportado procedente del Consorcio Regional de Transportes -principal financiador-. Sin embargo, ésta se ha reducido un 1%, lo que se ha traducido en unas pérdidas cercanas a los 4,5 millones de euros. Así se recoge en un informe económico elaborado por la sección sindical de UGT-EMT basado en las cuentas de 2013. El documento señala además que el número de viajeros ha descendido un 0,3%, mientras la cifra de negocio ha caído un 1,2%, lo que demuestra la "inadecuación de los ingresos a la actividad de la empresa, que resta recursos de manera injustificada". En el último año, se ha eliminado un 6% de las líneas de autobús.
El Ayuntamiento no está alarmado y considera que con la elaboración del Plan de Futuro ya está todo hecho; para la oposición es una ocurrencia más que una garantía
La ausencia de financiación pública ha obligado a la empresa a endeudarse con entidades de crédito. Ante esto, el sindicato lo que propone es un giro en la política económica para lograr carga financiera a través de instrumentos públicos de financiación y de esta manera no tener que recurrir al endeudamiento. Para corregir el desequilibrio económico apuesta por la "vía del crecimiento de los ingresos, elevando la tarifa de equilibrio hasta un nivel que iguale el valor de los gastos de la explotación". La reducción de oferta y recursos no es la mejor opción para reducir gastos según el informe, pues estos recortes "debilitan la estructura económica de la empresa y su capacidad para generar ingresos".
¿Unas pérdidas intencionadas?
La oposición se debate entre la incredulidad y la indignación. "Es inconcebible que en noviembre nos engañaran y dijeran que todo dependía de la venta del solar [parcela de las cocheras de Buenavista]", critica Ruth Porta, edil del PSOE madrileño. Mientras el Ayuntamiento de Botella se da por satisfecho con la elaboración del Plan de Futuro, para el PSM no se ha presentado ni una sola solución, "solo ocurrencias como la fusión, cuyas ventajas no han sido capaces de explicar". Porta recuerda a este diario que UPyD, PSM e IU pidieron un consejo extraordinario para conocer el escenario económico, garantías de que la fusión entre EMT y Madrid Movilidad es "limpia", balance de cuentas, etc, y "no llevaron nada". El Ayuntamiento se negó a hacer un informe económico que también le había solicitado la oposición. La EMT está "en pérdidas de forma intencionada", asegura. La inviabilidad económica de la empresa justificarían el fin de la gestión municipal, y las sospechas sobre las oscuras intenciones de Botella siguen ahí.
Falta de previsión, errores de gestión y decisiones políticas son señalados como los responsables de la ruinosa situación; el PSM habla incluso de que la EMT está en pérdidas intencionadamente
El convenio de adhesión del Ayuntamiento y el Consorcio de Transportes del pasado 20 de diciembre, aprobó unas condiciones de financiación "absolutamente perjudiciales para el transporte público" a juicio de Porta, porque introduce un nuevo sistema de financiación basado en kilómetros recorridos en lugar de viajeros transportados, y se establece también que no habría revisiones en la tarifa de equilibrio en ningún caso, haya variaciones o no. Ahora, representantes de los trabajadores y los grupos de la oposición están pendientes del contrato que regulará la relación entre el Consorcio y la EMT.
La última y bronca reunión del Consejo de Administración de la EMT terminó aprobando unas cuentas solo gracias al PP y con toda la oposición negándose a firmar las actas anteriores. El PSM insiste en que se ha mentido y se ha ocultado lo que se iba a hacer tanto a los miembros del Consejo, como a la oposición y a la plantilla. Y advierte: si hubiera consecuencias para los trabajadores y/o usuarios, acudirán a los tribunales, y no precisamente por lo laboral.
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