"PP y Ciudadanos son partidos parecidos pero distintos, así que cada uno concurrirá con sus listas". De esta forma tan rotunda se ha pronunciado este miércoles el coordinador nacional del Partido Popular, Elías Bendodo, al cerrar la puerta a cualquier posible coalición electoral con Ciudadanos en Andalucía. Especialmente después de conocerse la negativa del partido que preside Inés Arrimadas, en clara contradicción con posiciones recientes como la defendida por Edmundo Bal en plena Semana Santa, cuando éste abogó por la confluencia en las urnas de ambos partidos.
El también consejero de Presidencia de la Junta se ha pronunciado en tales términos tras una pregunta de Vozpópuli, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, en la que ha comparecido en solitario. Las tajantes palabras del 'número 3' de Génova se producen justo una semana después de que el presidente de la Junta, Juanma Moreno, asegurara que los populares andaluces estudiarían la posibilidad de concurrir en listas conjuntas con los liberales "cuando se convoquen las elecciones". Transcurridos dos días desde que el gobernante andaluz anunciara los comicios, para el 19 de junio, ya no cabe ninguna posibilidad para una plataforma de centroderecha.
"A día de hoy no se contemplan" las listas conjuntas, ha dejado claro Bendodo para, a renglón seguido, recordar que "ya hemos conocido la postura de Ciudadanos", por lo que alto dirigente del PP nacional "no cree que haya más debates" al respecto.
Los sondeos sobre intención de voto para Cs en Andalucía son tan malos que, en el mejor de los casos, les otorgan 3 escaños, frente a los 21 actuales. No son pocos los analistas políticos y expertos en demoscopia que ven como una estrategia "práctica y útil" la que apunta a que los liberales deberían centrar todos sus esfuerzos de campaña en las tres provincias andaluzas por donde tienen posibilidades de lograr un diputado: Sevilla, Cádiz, por donde concurre Marín, y Málaga.
Pocos días antes de que Moreno dejara abierta alguna posibilidad de listas conjuntas entre conservadores y liberales el portavoz parlamentario en el Congreso de la formación naranja, Edmundo Bal, abogaba por tal posibilidad. Luego vendría la negativa del vicepresidente de la Junta y candidato, Juan Marín, a quien es difícil sacar del argumentario de "una coalición de gobierno como la que ha funcionado hasta ahora", en alusión al Ejecutivo de PP y Cs conformado en enero de 2019, gracias al apoyo de Vox como socio externo de legislatura.
Otras fuentes cercanas a Moreno Bonilla, consultadas por este medio digital, reconocen que al presidente de la Junta le ha sorprendido la negativa tan rotunda de la dirección nacional de Ciudadanos, expresada justo después de que él mismo dejara abierto un marco de posible consenso entre ambas fuerzas, en el mismo espectro ideológico del centroderecha. De hecho, Vozpópuli ya avanzó que la propia Inés Arrimadas se había puesto en contacto con el también presidente del PP andaluz para pedirle concurrir juntos.
Las fuentes citadas califican de "error táctico" de Cs haber cerrado la puerta a una especie de 'Andalucía Suma' cuando la presidenta de los liberales aún no tenía una negativa al respecto por parte del Partido Popular.
Moreno dijo hace ocho días, sobre tal escenario de confluencia que lo analizaría "buscando el interés general y también el interés electoral". A este respecto, añadió el gobernante centrista, "tendremos que ver si esa plataforma, combinación, coalición es útil en el sentido de captar el interés, la atención y el cariño de los ciudadanos de Andalucía, y si eso puede propiciar una mayoría más amplia, o si por el contrario no, al generar rechazo o problemas", valoró Moreno.
Quien será por tercera vez consecutiva candidato a la presidencia de la Junta de Andalucía (2015,2018 y 2022) enumeró también la posibilidad de que la posible coalición PP+Cs "pueda generar desvío de votos hacia otras formaciones políticas". Sin duda se trata de un elemento clave y primordial, si se tiene en cuenta que tal argumento sobre el posible rechazo de votantes, traducido en fuga de votos, es algo que comentan numerosos dirigentes del PP andaluz en las provincias, cuando se les consulta en privado acerca de una especia de 'Andalucía Suma', tipo País Vasco o Navarra con Cs.
Las declaraciones de Moreno al dejar abierta la posibilidad de listas conjuntas con Cs se produjeron un día después de conocerse una encuesta sobre intención de voto para Andalucía, publicada por El Español, que le otorgaba al PP 46 diputados frente a los 49 que lograría si se presentara en una lista conjunta con Cs. Los liberales, por separado, salen tal mal parados en el sondeo de Sociométrica que no lograrían ningún escaño, con un 3,9%. En Andalucía pasando el corte del 3%, al contrario que en Madrid (5%) se puede lograr entrar en el Parlamento.
Expertos en demoscopia consultados explican que Cs no lograría entrar en la Cámara autonómica –a pesar de obtener el 3,9%– porque la mayoría de las provincias no tienen muchos diputados en juego, y al haber cinco partidos que aspiran a lograr un escaño y no haber tanta diferencia entre la segunda, tercera e incluso cuarta fuerza en algunas circunscripciones, el quinto en liza, a pesar de superar el umbral de representación, no conseguiría escaño.
Cabe recordar que tras el revuelo que produjeron unas declaraciones de Marín y Arrimadas, el 4 de diciembre de 2021, cuando ambos apostaron claramente por la coalición electoral para ir en listas conjuntas con el PP, la dirección nacional de Cs dio un giro y comenzó a hablar de fórmulas de "coalición de gobierno" con su actual socio en Andalucía, así como en otras comunidades autónomas. Sin embargo, el portavoz naranja en el Congreso de los Diputados, Edmundo Bal, volvió a retomar durante la Semana Santa la posibilidad de una coalición electoral con el PP.
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