Todos esperábamos con ganas sentarnos la noche del 24 de diciembre para celebrar con nuestras familias la Nochebuena. Esta misma sensación tenía la familia de Carlota, una adolescente cordobesa de 14 años con parálisis cerebral que se disponía a celebrar junto a su familia cuando se dio cuenta que le habían robado su silla, valorada en 3.000 euros, y que había sido financiada por el Servicio Andaluz de Salud. Lo que tenía que ser una noche de celebración y felicidad se tranformó en pesadilla, ya que Carlota necesita esa silla.
La angustia de su madre, Susana, que publicó en redes sociales el hecho y su pesar por la pérdida fue lo que movilizó al cantante Omar Montes a actuar. A través de una publicación en X, Montes expresó: "Por favor, ¿alguien podría ponerme en contacto con Carlota? Me gustaría comprarle una silla de ruedas nueva, gracias de antemano y felices fiestas”.
Tras su ofrecimiento, él mismo confirmó haber contactado con la familia de Carlota, aunque no detalló el acuerdo al que llegaron. Se presume que el cantante madrileño se comprometió a financiar una silla similar a la robada, la cual estaba diseñada específicamente para las necesidades de Carlota, con materiales ligeros y ajustes personalizados. No es la primera vez que el madrileño de Pan Bendito acude al rescate de alguien que lo necesita. Durante la pandemia, Omar Montes estuvo haciendo grandes compras de alimentos y repartiendo entre sus vecinos. En este caso, el madrileño se ha convertido en un regalo adelantado de Reyes Magos para Carlota y su familia.
El gesto solidario de Omar Montes ha recibido aplausos en redes sociales, con comentarios como: "En el mundo tenía que haber muchas personas como tú para ayudar a las personas que lo necesitan" y "estas son las cosas que te hacen grande", reflejando la admiración y agradecimiento de la comunidad hacia su acción.
Denuncia e investigación en curso
La familia de Carlota, que presentó una denuncia policial por el robo, destacando que la silla estaba en un lugar de difícil acceso, bajo las escaleras del portal, sugiriendo que el ladrón actuó con conocimiento.
Como cada vez que acuden a la casa familiar, dejaron la silla de ruedas en el hueco bajo las escaleras en el portal. “Es un portal dentro de un patio, así que de ninguna manera era visible desde la calle” asegura Susana Jiménez, madre de Carlota. Cuenta que a la cena de Nochebuena llegaron “sobre las 20:00 y sabemos que a las 21:00 la silla seguía bajo las escaleras”, cuando llegó el padre de Carlota a la cena. Pero, cuando salieron para volver a su casa, “sobre 22:30 o 23:00, la silla había desaparecido”. En ese momento, preguntaron a los vecinos, por si alguien hubiera abierto el portal a otras personas o supieran del paradero de la silla, pero no la hallaron y por ello interpusieron la correspondiente denuncia.
La niña, que fue diagnosticada de parálisis cerebral a la semana posterior de su nacimiento, se mueve sin ella en casa, pero la necesita para ir a la calle, asegura su madre. Esta silla de ruedas la compraron a medida en septiembre de 2022, por un precio de 2.600 euros, precisa. “Nunca me imaginaba que pudieran robar la silla de ruedas”, dice aún perpleja la madre. "Lo único que se me ocurre es que la desmonten y la vendan por piezas", piensa, ya que se trata de una silla adaptada a medidas de una niña “muy chiquita, delgadita” y “es muy peculiar, de color morado”.
Mientras la policía investiga, la iniciativa de Omar Montes ha sido un consuelo y una solución práctica ante la difícil situación que se han encontrado.