Sevilla lleva unos días en los que por el aire silban las balas. Literal y metafóricamente. El alcalde de Sevilla, el popular José Luis Sanz reprocha a los ministros Grande-Marlaska y Óscar Puente la falta de inversiones en su ciudad. Las respuestas están siendo agrias en redes sociales, con Puente como línea de defensa más agresiva. El enfrentamiento Moncloa-Sevilla tiene a las infraestructuras y la inseguridad como protagonistas.
Por empezar con los frentes abiertos, el más grave nos lleva a uno de los barrios más pobres de España en Polígono Sur. El tiroteo ha ido aparejado de los reincidentes reproches del alcalde a Marlaska. Sevilla pide 500 uniformados más desde hace meses. Con el capítulo del sábado noche, en el que se oyeron armas de guerra en las Tres Mil Viviendas, el alcalde reitera sus exigencias.
El Ayuntamiento ha hecho llegar al subdelegado del Gobierno una solicitud de reunión “a la mayor brevedad posible”, ante la situación de seguridad. Las “fuertes detonaciones” y la incautación de un “importante arsenal de balas, munición y armas sofisticadas, y han creado una enorme alarma entre autoridades y ciudadanía”, ha comunicado el Ayuntamiento.
Este mensaje sucede a la reacción inicial ante “las imágenes que nos llegan de las Tres Mil Viviendas” que calificó en X de inadmisibles. “Es urgente que todas las administraciones nos sentemos para abordar la alarmante falta de policías nacionales”, publicó el alcalde.
También los uniformados, que reivindican desde hace tiempo más personal y equipamiento a través del sindicato mayoritario Jupol, han pedido urgentemente a Interior y a la Dirección General de la Policía más equipos de seguridad y armamento especializado. Ante la inseguridad que refleja el arsenal incautado en las Tres Mil, piden vehículos blindados para garantizar la seguridad en situaciones de alto riesgo.
Trenes y carreteras: la guerra de Puente
Pero sin duda, a pesar del fuego real del Polígono Sur, el alcalde está teniendo fuego cruzado dialéctico con el primer espadachín de Sánchez. El Ayuntamiento denunció la semana pasada que el Gobierno había reducido las inversiones previstas para el metro de Sevilla, cuya Línea 3 se encuentra actualmente en obras.
Desde el Ayuntamiento destacaron que las inversiones estatales se retrasaban el mismo día que Moncloa autorizó la inversión de 1.200 millones de euros para Cercanías en Cataluña. “Las inversiones en infraestructuras en Cataluña o Barcelona no dejan de incrementarse. No quiero pensar que las partidas que iban destinadas al Metro –de Sevilla- se retrasen porque se estén yendo a Cataluña”, dijo el alcalde, sumándose a la moda del agravio territorial.
“Estamos ante el gobierno más antisevillano de nuestra historia democrática”, dijo el alcalde. La respuesta de Puente, de nuevo a través de X, fua acaudalada: “Les voy a explicar por qué no me reúno, ni me reuniré con este señor -en alusión al alcalde de Sevilla- Es un mentiroso y un impresentable”.
Según el comunicado-post de Puente, no ha habido retrasos por parte del Gobierno en la inversión del Metro de Sevilla “y mucho menos porque le dé nada a Cataluña. Siempre tratando de enfrentar territorios”, dice el ministro. Tanto el ministro, como Hacienda como la Delegación de Gobierno en Andalucía explican que el Estado cofinancia al 50% las obras que ejecuta la Junta de Andalucía. Según el Gobierno Central, la Junta propuso posponer la ejecución presupuestaria ante dilaciones en la contratación y licitación de las obras.
Siempre en X, Puente asegura que “con este señor es imposible el diálogo y el entendimiento. No concibe la política como servicio a la ciudadanía, sino como un escenario”. Sin embargo, el alcalde ha vuelto a la carga, “ya sabemos que Óscar Puente no quiere recibir al alcalde de Sevilla y que Sánchez no va a invertir nada. Este castigo contra los sevillanos es inadmisible. Seguiremos protestando porque no es una cuestión de partidos. Sevilla está por encima de todo”.
De nuevo, la respuesta de Puente apunta a las mentiras de Sanz, adjuntando en su post el acta de la comisión de seguimiento del convenio en el que “se puede constatar que es la propia Junta de Andalucía, la que ante el retraso de las obras de cuya ejecución se encarga, solicita una recalendarización de los pagos”.
El documento editado por el ministro con su propia mano muestra la actualización del programa de ejecución por parte de la Junta de Andalucía, lo que lleva, afirma Puente, a retrasar las partidas presupuestarias de la obra que el Estado sufraga con 650 millones de euros, “los pagos se retrasan porque las obras se retrasan... y rectifica la mentira que has dicho”.
Sanz trata de reconducir el tono agrio de Puente diciendo que “yo nunca insultaría a un ministro del gobierno de España porque sería insultar a todos los españoles. Parece que el ministro no tiene este criterio y no le importa insultar al alcalde de todos los sevillanos”.
Sevilla en el avispero
Lo que está claro es que tendrán que pasar muchos meses para ver una imagen como la de la semana pasada en la que Puente estuvo en Granada con la alcaldesa popular, Marifrán Carazo, anunciando el inicio de la llegada del Ave y la integración en la ciudad de la estación de tren. Un “paso histórico”, definieron ambos dirigentes. En Sevilla, Sanz representa hoy por hoy uno de los rostros más combativos contra el Gobierno.
No le faltan razones al alcalde hispalense. En la cita histórica de Granada también estuvo presente la consejera de Fomento y Vivienda de la Junta de Andalucía, Rocío Díaz, que entregó a Puente una carta de reyes con necesidades históricas de Andalucía. De ellas, nada más y nada menos que 14 intervenciones son para la provincia de Sevilla y, algunas, llevan décadas de retraso.
Sin noticias en carreteras y ferrocarriles desde el 92
La hemeroteca lo dice. En Sevilla las grandes noticias e inauguraciones brillan por su ausencia. La solicitud de la Junta a Puente explicita varios agujeros negros de inversión. En carreteras, ahí está en segundo anillo de una conurbación que integra en torno a la capital de Andalucía a cerca de 1.5 millones de personas.
Pero ese segundo anillo, la SE-40, tiene aún 77 kilómetros por cerrar. También están las obras del puente del V Centenario, cuyos 4 carriles + 1 reversible ya eran una apuesta arriesgada para el tráfico de los años 90. La eternización de la ampliación del sexto carril es ejemplo de la evolución de las grandes infraestructuras en Sevilla. Las obras empezaron en 2021 y está ejecutado un tercio de la misma.
Respecto a las infraestructuras ferroviarias, el principal dolor de cabeza de Puente, las peticiones se acumulan. El AVE Sevilla-Huelva-Faro, cuyo estudio acaba de ser reactivado para alivio de los onubenses, la conexión Santa Justa-San Pablo, Sevilla es el único gran aeropuerto de España que no está comunicado por vías, la mejora y ampliación de la red de Cercanías que, a día de hoy tiene un círculo sin cerrar con una estación fantasma que muere en tierra de nadie... Sevilla está sedienta de inversiones, y eso es un hecho que no lo acalla el fragor de las batallas tuiteras.
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