Todo sigue igual. O la vida sigue igual, como rezaba la famosa canción de uno de los españoles más universales, Julio Iglesias. En este caso, esta coreada frase de la canción puede aplicarse a Andreu Viloca. El tesorero de CDC ha vuelto a ocupar su cargo en la sede del partido en la calle Còrcega de Barcelona tras pasar por la cárcel el mes pasado como imputado en el presunto caso que investiga un juez de Tarragona a propósito del caso de la presunta financiación ilegal del partido nacionalista, conocido mediáticamente como el “caso del 3%”.
Viloca ha contado con “todo el apoyo personal y económico” de Convergència para “proseguir con su vida profesional puesto que él es totalmente inocente”, según explican fuentes convergentes a Vozpópuli en Barcelona. El tesorero recibió un “salvavidas” económico cuando el partido le pagó la fianza de 250.000 euros en un cheque para que saliera de la cárcel después de permanecer en ella por orden judicial durante 21 días.
El fiscal teme que Viloca, una vez en libertad, pueda destruir pruebas después de que en su despacho se hallara una trituradora de documentos
El partido nacionalista que preside Artur Mas y que está integrado en la coalición separatista Junts pel Sí (62 diputados en el Parlament) le ha “ofrecido toda su confianza y le ha autorizado” a volver a ocupar su cargo de tesorero del partido.
Pago de la fianza en cheque
La Audiencia de Tarragona dejó hace una semana en libertad bajo fianza a Viloca, pero le obligó a comparecer semanalmente ante el juez. El tesorero de Convergència y administrador de la fundación convergente CatDem salió a comienzos de este mes de la prisión de Quatre Camins (Barcelona) después de que la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Tarragona haya decretado por la mañana su libertad.
CDC depositó en el juzgado un cheque por una cantidad de 250.000 euros para cubrir la fianza. Viloca estaba en prisión preventiva desde el pasado 22 de octubre a raíz del auto que dictó el juez de El Vendrell (Baix Penedès).
El tesorero de CDC fue uno de los 11 detenidos en la operación Petrum III que llevó a cabo la Guardia Civil el 21 de octubre en calidad de policía judicial de la investigación que está instruyendo el juez de El Vendrell Josep Bosch. Viloca está acusado de seis delitos relacionados con la corrupción y la financiación ilegal del partido: prevaricación, cohecho, financiación ilegal, alteración de concurso público, falsedad y blanqueo de capitales. El fiscal teme que Viloca, una vez en libertad, pueda destruir pruebas después de que en su despacho se hallara una trituradora de documentos.
La CUP decidirá el 29 de noviembre si inviste a Mas
Por otra parte, hoy siguen las negociaciones entre Junts pel Sí y la CUP para poder celebrar “antes de las elecciones generales del 20 de diciembre” la tercera sesión de investidura en el Parlament. Tanto CDC como sus socios independentistas de ERC no se mueven ni un ápice en cambiar a su candidato a presidente de la Generalitat y siguen apostando por Mas. La CUP, que ya ha votado en contra de la investidura del president en funciones, ya asegurado que decidirá en asamblea el próximo 29 de noviembre si confía en Mas o no.
Fuentes de la formación antisistema rechazan a Vozpópuli las “presiones” por parte de Junts pel Sí y tampoco quieren asumir las acusaciones de la formación de que el “no” de la CUP a Mas “bloquea el inicio del proceso independentista”.
Los ánimos entre Junts pel Sí y la CUP se han moderado en los últimos dos días y todo dependerá de si las bases de la formación radical y antisistema aprueban a Mas a finales de este mes. Si no lo hacen, no podrá investirse president si es Mas el candidato y a partir del 9 de enero se convocarán elecciones de forma automática en Cataluña para mediados de marzo.
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