La red de ferrocarriles españoles ha experimentado una nueva incidencia este martes. Una avería en la estación de Atocha provocaba la detención de los trenes de Cercanías y Media Distancia durante unos 30 minutos, afectando al tráfico ferroviario en la Comunidad de Madrid de estos servicios en Atocha.
Según fuentes de Adif (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias), el fallo se debió a una falta de tensión en la catenaria registrando la incidencia a las 14:32 horas. Como resultado, dos trenes quedaron inmovilizados en el trayecto: uno entre las estaciones de Laguna y Embajadores y el otro convoy quedó paralizado en la entrada de la terminal de Atocha.
Por otro lado, Renfe informó que, tras 20 minutos, se restableció la tensión y por ende el servicio volvió a recuperarse de manera progresiva. Desde Adif confirmaron que la incidencia fue resuelta a las 14:59 horas.
Poco después de resolver la primera incidencia, la estación de Chamartín sufría otro incidente significativo nuevamente por una avería en el tendido eléctrico. A las 15:30 horas, tres de las ocho vías de alta velocidad quedaban inoperativas por la rotura y caída de un cable eléctrico. Esta situación volvió a provocar retrasos en todas las líneas, esta vez de alta velocidad, que pasan por la estación. Adif puso en marcha el protocolo de emergencia, que incluía la regulación de accesos, despliegue de patrullas de seguridad, refuerzos de auxiliares y asistencia a viajeros vulnerables. A pesar de todos los esfuerzos, seis trenes llevaron retrasos de entre 30 y 40 minutos.
Incidencias constantes
Para desgracia de los usuarios de Renfe, esta situación se ha convertido en parte de la experiencia a la hora de coger un tren perteneciente a los ferrocarriles españoles, ya que las averías e incidencias son una constante en toda la red.
Hace apenas dos días Cercanías Madrid avisaba a través de sus redes sociales una avería entre las estaciones de Cantoblanco y Chamartín afectando a una línea de trenes de la comunidad. Dicha incidencia fue subsanada en algo más de media hora.
El fin de semana pasado tampoco era ajeno a una incidencia de Renfe, y es que Cercanías Madrid aprovechaba la red social X -antes Twitter- para anunciar hasta tres averías seguidas, una afectando Atocha, otra a las líneas del sur de la región, entre las estaciones de Nuevos Ministerios y la ciudad de Aranjuez y otra en el centro de la capital afectando a las estaciones habituales de Atocha, Chamartín y Puerta del Sol.
El pasado 14 de agosto un tren Intercity Madrid-Sevilla que partía de Puerta de Atocha-Almudena Grandes a las 9:27 con llegada prevista a Sevilla a las 12:25 se veía forzado a detenerse por un fallo eléctrico. En este caso, la avería había afectado al sistema eléctrico y el convoy quedaba parado con cientos de pasajeros a bordo sin aire acondicionado ni agua durante casi tres horas.
El problema se debió una incidencia "en el sistema de electricidad, que ha dejado al tren sin tensión". Tras comunicarse la avería, "se ha enviado material con adaptador desde Sevilla para remolcar el tren y sacarlo de la zona neutra para que coja tensión", indican fuentes de Renfe.
A principio de este mismo mes se volvía a registrar una nueva incidencia, esta vez en un convoy Renfe-AVLO Madrid-Levante cuyos pasajeros se veían forzados a esperar durante dos horas a 40 grados sin aire acondicionado atrapados en los vagones en mitad del túnel de alta velocidad entre las estaciones de Atocha y Chamartín. La desesperación y la falta de aire obligaron a varios pasajeros a romper las ventanas del convoy para poder respirar con tranquilidad.
@renfe Avlo con llegada a Madrid desde Valencia. Más de dos horas de retraso, asi quedaron algunos vagones despues de estar encerrados sin aire acondicionado ni tan siquiera ventilación. Sin agua.... una alegría de compañía ferroviaria pic.twitter.com/CaHA37WiPM
— Julio Manuel Cuevas (@juliomcuevasm) August 5, 2024
Dicha incidencia provocó ese lunes 5 de agosto a lo largo de la tarde la interrupción durante dos horas y veinte minutos del servicio ferroviario de alta velocidad entre Madrid y Levante lo que volvió a ocasionar caos, esta vez, en la estación de Chamartín-Clara Campoamor, donde se aglomeraron cientos de personas tanto dentro como fuera del edificio.
Según Adif, la incidencia se debió a "una incidencia en un tren en Jardín Botánico, se encuentra interrumpida la circulación en la línea de alta velocidad que une Madrid Chamartín con Levante". Más de dos horas necesitaron para restablecer la circulación en dicha línea de alta velocidad.
Pequeñas averías en la red
Y es que son las grandes incidencias las más sonadas: averías que fuerzan a los usuarios a estar atrapados varias horas en un convoy sin electricidad -con lo que eso conlleva- en medio de la vía entre dos ciudades o un túnel, o aquellos pasajeros que debido a los retrasos se aglomeran en las estaciones. Pero aunque estas sean las que más ruido hacen por sus efecto a gran escala, las que son constantes -casi diarias- son las pequeñas incidencias en la red de transportes ferroviarios.
Dejando al margen las obras de mejora en la infraestructura a lo largo y ancho de la península, la red de transportes de ferrocarriles sufre, casi a diario, averías a pequeña escala que acaba por afectar tanto a los usuarios diarios de este servicio público como a los ocasionales. Las redes sociales son un gran ejemplo de esta situación, a través de X, Renfe avisa de las incidencias ocurridas y es en esta plataforma donde puede observarse la gravedad de la infrafinanciación de este transporte. Llegando a ser un problema diario en algunas semanas dichas incidencias acaban por retrasar el servicio prestado. Las averías suelen ser subsanadas a partir de la media hora desde que esta comenzara; pero pese a que el tiempo pueda parecer escaso frente a las grandes averías, estas situaciones son muy recurrentes y siguen causando retrasos en el servicio siendo un problema para los usuarios.
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