Miguel Bernad está en busca de dinero. El líder del pseudosindicato Manos Limpias ha pedido al juez de la Púnica que le reintegre la fianza de 3.000 euros que abonó para ejercer la acusación popular en la trama de corrupción protagonizada por Francisco Granados. El magistrado Manuel García-Castellón, que aún no ha dado el visto bueno al depósito, ha exigido al secretario general de la agrupación que aporte un justificante "legible" del ingreso que realizó y que ahora solicita que se le devuelva.
El secretario general de Manos Limpias ha remitido un escrito al juez de la Audiencia Nacional en el que extiende su intención de recuperar el dinero que ingresó para personarse contra el exconsejero madrileño. "Que cumplimentando la providencia de ese Juzgado y cuya copia adjunto como documento número 1 procedo mediante este escrito a aportar fotocopia del depósito de fianza que en su día efectué", se lee en el documento al que ha tenido acceso Vozpópuli.
La copia del documento del depósito es ilegible. De ahí que García-Castellón haya insistido en que se presente otro justificante. Con dificultad se podría inferir que Bernad aportó 3.000 euros para personarse en la trama, pero no queda claro.
Por ley, la acusación popular debe presentar fianza de la clase y cuantía que el juez estime suficiente, aunque el artículo 20.3 de la Ley Orgánica del Poder Judicial establece que se podrán exigir sumas que impidan el ejercicio de la acción popular.
Bernad habría dicho a su círculo más cercano que tenía la intención de liquidar Manos Limpias y retirar todas las denuncias presentadas, según publicó El País en 2016. Ahora, a finales de mayo, el pseudosindicato del que asegura sigue siendo secretario general retiró su acusación del caso Pujol, entre otras cosas, por la imposibilidad de abonar la fianza de 20.000 euros requerida por el juez.
Apropiación indebida y extorsión
Bernad ha pedido el reintegro de la fianza de Púnica en pleno frente judicial en su contra. Recientemente, la Fiscalía ha solicitado tres años y seis meses de cárcel para Bernad por un delito continuado de apropiación indebida. Le acusa de haberse quedado con el dinero del pseudosindicato. En concreto, ha cifrado en 103.500 euros el monto sustraído en ocho extracciones. Dicha suma habría sido recaudada entre el millar de afectados por los casos Fórum y Afinsa para ejercer acciones judiciales.
El ministerio público suma así otra acusación contra el líder sindical, a quien ya señaló en el caso Ausbanc por participar en la trama de extorsión a entidades bancarias gestionadas por Manos Limpias. Los fiscales pedían para él una pena de 25 años de prisión.
Por el caso Ausbanc, Bernad estuvo nueve meses en prisión preventiva en la cárcel de Navalcarnero (Madrid) tras ser detenido en abril de 2016. Una vez en libertad, previo pago de una fianza de 50.000 euros, el líder sindical llegó a decir que se le había "investigado torticeramente y en todas las direcciones".
Esta causa le llevará al banquillo el próximo 23 de septiembre y se espera que juicio dure hasta el 11 de octubre, según el decreto de señalamiento emitido por la Sección Cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional.
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