El presidente de Senegal, Bassirou Diomaye Faye, tomó posesión la primavera de 2024 tras una campaña electoral en la que defendió medidas drásticas para evitar que los jóvenes del país emigrasen en cayucos a lugares como Canarias por la ruta atlántica o Lampedusa (Italia) por el norte de África. Recién llegado de China y previendo disolver el parlamento en la búsqueda de una mayoría que le permita ejecutar su agenda de transformación, Bassirou Diomaye Faye se ha encontrado con el desolador panorama de decenas de jóvenes hundidos por la zozobra de un cayuco el pasado 8 de septiembre en la zona de Mbour con 200 cuerpos hundidos, de momento recuperado apenas un 20% que han emergido a 4 kilómetros de la costa.
La llegada de jóvenes a Canarias tiene a las islas saturadas pero hay cosas positivas en el caso de los subsaharianos: un comportamiento ejemplar en las calles, centros comerciales o tiendas donde venden ropa de bajo coste brujuleando como el resto de jóvenes canarios donde hay wifi abierta para ponerse en contacto con sus familias en origen o destino, Francia. En Canarias generan buena percepción en la gente de las islas porque mantienen un perfil bajo, otra cosa son los rifeños procedentes el Sáhara ya que, saharauis, mauritanos incluidos, en Canarias apenas hay llegados en patera. Todos son ninis pero muy educados y, en zonas rurales, el tratamiento que reciben no es paternalista como se podría creer.
El PP y Gobierno de Canarias han firmado una propuesta de pacto nacional de inmigración que apunta precisamente a la existencia de financiación para las CC.AA porque el gasto deberá atenderse y no parece que vaya a parar dado que la mayor parte de los que llegan a las islas son senegaleses de entre 18 a 35 años. En Senegal con casi 18 millones de habitantes, 3,9 millones de habitantes en Dakar, su capital, el 40% de la población tiene menos de 15 años y el 46,8% de los jóvenes son nini (ni trabajan, ni estudian, ni se forman), y el 91% no tiene formación profesional.
La Encuesta de Población Activa (EPA) de Senegal del primer trimestre de 2024 indica una tasa de desempleo del 23,2% cuando en el mismo periodo de 2023 era del 21,5%. En las áreas rurales de Senegal el paro es del 31,7% y del 17,5% en zonas urbanas. Por géneros, hay una la tasa del 36,7% de mujeres que están en desempleo ante el 13,3% de los hombres. El resto es chiquillería sin expectativas de algo a corto plazo.
La estadística laboral senegalesa señala que los jóvenes entre 15 y 24 años que ni trabajan, ni estudian suman el 34%. En las áreas rurales suman el 43,8% de los desempleados en este margen de edad mientras que en zonas urbanas están en el 25,5%. En cualquier caso, las mujeres ninis representan el 43% y los hombres el 25,9%. En comparación con el año anterior, la evolución de los principales indicadores del mercado laboral muestra una disminución de las tasas de actividad y empleo, y un aumento del nivel de desempleo en sentido amplio.
Para el presidente senegalés, que esta semana se desplazó a la pequeña Mbour para compartir el dolor con las familias de los al menos 200 desaparecidos el pasado 8 de septiembre, al margen de la mano dura contra las mafias, ha pedido a las familias senegalesas que no presionen a los jóvenes y sean pacientes, que la economía del país cambiará. A juicio de Faye "quiero dejar claro que a quienes se dedican a este negocio, perseguiremos a todos los responsables y ellos responderán de sus actos". Se supone que viajaban 200 personas y apenas han aparecido menos de 40 cuerpos.
Las autoridades policiales senegalesas ya han dado los primeros datos de la detención del dueño del cayuco. C. Sall ha pasado a disposición judicial, tiene varias esposas atendiendo a su criterio religioso, es padre de 12 hijos, tiene 52 años. Fue detenido en la casa de un curandero "donde iba a dotarse de protecciones místicas para escapar de la detención" antes de ser trasladado a una comisaría de policía urbana de Diamaguène.
Bassirou Diomaye Faye ha pedido a las familias que mentalicen a sus hijos de los riesgos de irse del país en cayuco a Canarias, aunque no ha mencionado las islas de forma concreta. "Es cierto que en determinadas familias la situación social es difícil. Pero debemos animar a los jóvenes e invitarlos a ser más pacientes. No tiene sentido presionarlos. Debemos ofrecerles buenas vías para el éxito. En lo que a nosotros respecta, como Estado, estamos en el proceso de implementar mecanismos que permitan a los jóvenes encontrar una actividad que satisfaga sus necesidades", dijo. Ha insistido en pedir "paciencia y perseverancia en las buenas obras; pero todo menos la vía marítima que sólo entraña riesgos".
En el caso de trabajadores de más de 24 años, en lo que respecta al empleo asalariado, su proporción sobre el total de empleos se situó en 40,7% durante el trimestre analizado. Esta proporción aumentó en 1,3 puntos porcentuales en comparación con el mismo período del año 2023 (39,4%). Varía según el sexo y el medio de residencia. En los hombres, se estima en 45,7% frente a 31,1% para las mujeres. El acceso al empleo asalariado es mayor en el medio urbano (46,6%) que en la zona rural (28,9%).
Durante el primer trimestre de 2024, los cuidadores familiares representaron un aumento del 4,3% de la población activa en comparación con el 4,5% en el trimestre correspondiente del año anterior, lo que representa una disminución de 0,2 puntos porcentuales. Estos trabajadores residen principalmente en zonas rurales (8,8% de la fuerza laboral frente al 1,2% en zonas urbanas). En cuanto al género, se ha observado una superioridad numérica de las mujeres entre la población de cuidadores familiares (4,8% frente al 3,9% para los hombres).
El presidente senegalés sentencia: "el gobierno está trabajando intensamente para implementar políticas públicas adecuadas para dar trabajo a los jóvenes aquí en Senegal e invitarlos a la reconstrucción de nuestro país. Es comprensible que los padres ejerzan presión, pero la presión no debería ir más allá de la motivación para trabajar, apretarse el cinturón y tener paciencia; pero aquí en Senegal no debe llevarnos a correr el riesgo suicida de tomar las olas. Sólo existe la muerte como alternativa a un viaje tan peligroso".
