Dentro de la "operación limpieza" que dice el PP haber puesto en marcha, se enmarca la intervención, hoy en el comité ejecutivo nacional del PP, de una persona que nunca suele tomar la palabra en estas citas, la tesorera del partido, Carmen Navarro, que ha adelantado parte de las conclusiones de la investigación interna que puso en marcha hace quince días. El informe que ha presentado abunda en la que ha sido la versión oficial que ha venido defendiendo el partido desde que 'El Mundo' hablara de la existencia de sobresueldos en "dinero b", esto es, que las percepciones que se abonan por el partido a su personal "ya sea en concepto de salarios, pluses, gratificaciones o dietas no exentas figuran convenientemente consignadas en la contabilidad del partido y son objeto de las retenciones fiscales y de las cotizaciones sociales correrspondientes, de acuerdo con la legislación vigente en cada caso".
El estudio arranca en 1995, puesto que de los años anteriores parece no haber documentación en el cuartel general de los populares.
Igualmente Navarro avala la legalidad de las donaciones recibidas, donativos que alcanzaron en 20 años la cantidad de 11,8 millones de euros, lo que supone el 2,3 por ciento de la financiación del PP, que obtiene sus principales fuentes dinerarias de las subvenciones públicas. De estas cantidades, 8,4 millones son donativos de carácter anónimo, práctica que se prohibió en 2007. Desde entonces "corresponden única y exclusivamente a donativos nominales".
En definitiva, "la situación patrimonial de la sede central del PP puede considerarse como muy saneada" y las retribuciones "han sido objeto de retención fiscal y consignadas en contabilidad", ha asegurado Navarro.
Quizá lo más curioso es que se ha entregado a los periodistas el modelo de declaración jurada que ya han firmado María Dolores de Cospedal, Javier Arenas, Carlos Floriano, Esteban González Pons y otros, en los que además de asegurar que nunca han recibido en efectivo o por medio de talones al portador ningún tipo de retribución, pluses, sobresueldos o gratificaciones, prometen que "no conozco que se haya retribuido de forma distinta a persona alguna que haya prestado sus servicios al PP".
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