España

La carta desesperada de la víctima de una inquiokupa: "Ser vulnerable es un estilo de vida en España"

Una profesora jubilada que vive en Alcalá de Henares expresa en una carta sus sentimientos después de ser víctima de una inquiokupa que le debe más de 10.000 euros

Las mudanzas de los okupas y la suciedad que generan a los vecinos
Las mudanzas de los okupas y la suciedad que generan a los vecinos

"La Solución". Así se titula la carta abierta de Purificación, una profesora jubilada de Alcalá de Henares, que lleva años sufriendo a una inquiokupa que le debe más de 10.000 euros en el pago de varias mensualidades de alquiler. Esta mujer escribió a la Presidencia del Gobierno y recibió hasta tres respuestas en nombre de Pedro Sánchez. Ahora, ella decide tomar la palabra con una misiva en la que expresa sus sentimientos y denuncia el calvario que viven como ella miles de españoles con inquilinos que no pagan el arrendamiento y están en procesos judiciales.

El caso de Purificación fue revelado hace meses por Vozpópuli. Esta maestra, desesperada por la situación, llegó a contactar hasta en tres ocasiones con el presidente del Gobierno Pedro Sánchez. El Gabinete de La Moncloa respondió en su nombre las misivas de esta docente: "Comprendemos cómo se siente y el esfuerzo que le supone afrontar el día a día. Le transmitimos un mensaje de ánimo"

Sin cambios en la situación decidió redactar una carta abierta que tiene el nombre de "La Solución". "¿Tienes problemas para llegar a fin de mes? ¿Más gastos de los que puedes asumir?, ¿Los gastos de tus hijos te asfixian? ¿Vivirías mucho mejor si no tuvieras que pagar el alquiler? No te preocupes más, tenemos la solución y esta es legal e impecable: Deja de pagar la renta y los suministros, agua, luz, calefacción…. No, no te preocupes no te va a pasar nada, al contrario, por fin tú y tu familia vais a vivir como os merecéis", comienza la misiva.

El manual de la inquiokupa

A lo largo de seis páginas, Purificación explica el documento que se denomina "Manual de Okupación", que se puede descargar por internet "sin problemas". La víctima de una inquiokupa denuncia en su texto la demora de la justicia y los 'trucos' que usan estas personas para conseguir sus objetivos.

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"La concesión de vulnerabilidad lo realizan los servicios sociales de la localidad. Te citarán, tú llevas el historial médico (no van a pedirte informes médicos de especialista, tu palabra y un historial del médico de familia les vale) les cuentas, lo más apenado que puedas aparentar, los dolores graves que padeces, que te incapacitan para trabajar y que por este motivo has solicitado la incapacidad y les aportas la solicitud. Les dices también que la situación que estás viviendo te genera gran ansiedad", expone.

"Pero esto es España, no Europa aquí ser vulnerable es un estilo de vida, la sociedad es la culpable de tu situación, no tú", denuncia. La víctima de la inquiokupa también menciona las tretas tales como intentar buscar empleo o una oposición mientras los ingresos se generan en efectivo para no dejar rastro.

83.000 españoles víctimas de la inquiokupación

Purificación atestigua que este problema lo sufren en estos momentos cerca de 83.000 españoles. "Incluso el presidente de gobierno Pedro Sánchez, trata a la inquiokupacion de bulo y a los caseros de mentirosos. Por tanto, a los propietarios sólo les quedan resignarse y pagar los gastos", lamenta en la carta. "Mientras tanto tu sigues viviendo sin pagar, puede que pasen más de cuatro años", critica de forma jocosa sobre los métodos de la inquiokupa.

Pedro SánchezEuropa Press

"Así que adelante anímate, deja de pagar renta y suministros, el gobierno, las instituciones, la justicia y la sociedad te apoyan. Y si te da reparo declararte vulnerable sin serlo, no te inquietes los verdaderos vulnerables suele ser gente honrada que trabaja sin descanso para salir de su situación, que no utilizan a las instituciones para salir adelante y son tan despreciados e ignorados por ellas como los propietarios", analiza.

El final de la carta de Purificación es demoledor y expresa la desesperación que viven los propietarios que se ven desamparados ante este tipo de situaciones. "Te lo digo yo que soy propietario de un piso inquiokupado desde hace cuatro años y sé muy bien de lo que hablo", concluye.

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