De todos los ataques que Pablo Casado ha recibido en la campaña electoral del 4-M, el que más ha sorprendido en Génova ha sido el 'fuego amigo' de la expresidenta madrileña Esperanza Aguirre, quien esta semana enfatizó que el giro al centro del líder del PP "no ha funcionado". Lejos de rectificar, el presidente de los 'populares' se ha lanzado a por el votante del PSOE desencantado con Pedro Sánchez.
Aguirre desgranó el pasado lunes en la COPE una serie de "hitos" que, a su juicio, han dejado a Casado en una mala posición a la hora de intentar reunificar el centroderecha y acoger en el PP a los votantes de Ciudadanos y, sobre todo, de Vox.
Desde su punto de vista, el "giro al centro" y la "estrategia que el PP tomó en agosto" con el cese de Cayetana Álvarez de Toledo, el discurso en la moción de censura de Vox o la entrevista de Casado en febrero en RAC1 no ha funcionado, como quedó patente en las elecciones catalanas, donde los 'populares' no lograron hacerse con ninguno de los escaños perdidos por Cs y estuvieron cerca de desaparecer en esta comunidad autónoma.
"Esa estrategia no ha dado resultado y hay que ser suficientemente flexible y humilde para cambiarla", insistió Aguirre que, con todo, aseguró que Casado es un "líder" que "ilusionó a todos" los votantes del PP al llegar a la presidencia del partido en unas circunstancias "muy difíciles".
Almeida sale en defensa de Casado
El primero en salir en defensa de Casado fue, curiosamente, José Luis Martínez-Almeida, quien debe su ascenso político a Aguirre. El alcalde de Madrid quiso recordar que fue Casado quien nombró a Ayuso y que desde Génova y la Puerta del Sol trabajan en coordinación. "Desde el cariño (a Aguirre), le digo que la estrategia de Isabel Díaz Ayuso está funcionando porque es presidenta y Pablo Casado fue el que la nombró", señaló el también portavoz nacional del PP.
Ayuso no se quiso enfangar en este asunto cuando en el debate de candidatos de Telemadrid se le preguntó por las palabras de Aguirre, si bien este sábado dejó claro que Casado y ella son "el mismo proyecto". "Somos lo mismo, el mismo proyecto, el mismo partido, esta es su casa, es su cuna, nacimos juntos políticamente y aplico recetas que casi siempre van por el mismo camino", insistió en una entrevista a EFE.
Esperanza Aguirre e Isabel Díaz Ayuso.
Tras las declaraciones de Aguirre, fuentes de Génova subrayan a Vozpópuli que el diseño estratégico de la "refundación del centroderecha" que lleva a cabo la dirección del PP "está cogiendo impulso" en las últimas semanas de la mano del secretario general, Teodoro García Egea.
"Si primero varios dirigentes destacados de Ciudadanos anunciaron su salto a las filas 'populares', también en las últimas semanas se ha visto un Casado con un discurso más claro, más contundente y más directo contra Sánchez", hacen hincapié.
Esta estrategia se visualizó en el mitin del Wizink Center en el que se dio inicio a la campaña electoral de Ayuso, donde Casado apeló directamente al votante socialista descontento. “¿Os sentís identificados con Pedro Sánchez?” preguntó tras enumerar una serie de medidas llevabas a cabo por el Gobierno.
Tras ello, se dirigió directamente al votante socialista crítico con el PSOE actual: “¿Os sentís, como socialdemócratas, como personas que creéis en un partido como el que fue el de Felipe González? Vosotros también tenéis vuestra casa en este proyecto integrador, transversal, moderado, reformista, liberal, de futuro, de esperanza, de ilusión, ganador”.
Casado se acerca al empate técnico
Las citadas fuentes inciden en que el PP de Casado "abre las puertas a ensanchar más el centro político" ahora que Cs corre el riesgo de desaparecer y que desde Génova se quiere "recabar apoyos de todos aquellos que quieran ganar a Sánchez". En la dirección nacional del PP creen que esta estrategia está teniendo sus frutos en las encuestas, donde la mayoría de sondeos -con la clara excepción del CIS- les acercan a un empate técnico con el PSOE.
El 4-M se considera en las filas populares como "el primer asalto" para ganar a Sánchez. "El resultado será una foto que recorrerá toda España y puede cambiar el panorama político español y acelerar la tendencia alcista del PP", subrayan las citadas fuentes en un momento en el que Cs "coquetea desde hace meses" con el Ejecutivo de PSOE y Podemos, y Vox se muestra "desubicado y sin un proyecto claro".
En esa coyuntura política y con la posibilidad de que de los comicios madrileños Casado salga "fortalecido y preparado para ganar a Sánchez en las urnas", el PP afirma estar "en disposición de beber de ambas formaciones y, también, del votante socialista tradicional descontento con la deriva de Sánchez", concluyen las fuentes 'populares'.
Casado comienza a utilizar su estrategia
Este mismo sábado, Casado ha comenzado a emplear esta estrategia. En un acto en Pozuelo de Alarcón, donde ha acompañado a Ayuso, el líder del PP ha pedido aglutinar los votos de centroderecha en torno al PP, pero ha subrayado que también "abre la puerta" a los madrileños que "han votado a Leguina, a Felipe o a Rubalcaba y no se sienten identificados con un PSOE de Sánchez que pacta con ERC, con Junts y con Bildu". El Partido Popular, ha proclamado, es un "proyecto abierto" y "centrado" en el que "caben todos".
En la pegada de carteles de hace una semana, con la que arrancó oficialmente la campaña -en la plaza Salvador Dalí situada en el barrio de Salamanca-, Casado también dijo que en el PP también tienen "su casa" esos votantes socialdemócratas que no se sienten "identificados con Pedro Sánchez, quien "acerca cada semana a etarras a cárceles cercanas del País Vasco", va a "indultar a los presos del procés entre junio y julio" y va a "subir los impuestos en 90.000 millones de euros".
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